En la Universidad Austral de Chile (UACh) entendemos la sustentabilidad como una construcción colectiva, mediante la cual el ser humano aspira a que la humanidad y otras formas de vida prosperen en el planeta de manera perpetua. En este sentido y sabiendo de la triple crisis mundial (cambio climático, pérdida masiva de la biodiversidad y crisis de contaminación) es como la UACh se compromete a firmar el segundo Acuerdo de Producción Limpia o APL II.
Los APL son convenios voluntarios celebrados entre una organización, como en este caso, la UACh; la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático (que es una agencia CORFO); y los organismos públicos competentes en materias ambientales, sanitarias, de higiene y seguridad laboral, eficiencia energética e hídrica (Ministerios, SEREMI, Servicios públicos, etc.). Es una herramienta originalmente empresarial y de la industria, pero la Red Campus Sustentable (corporación líder en Chile y Latinoamérica de profesionales e instituciones de educación superior pro-sustentabilidad) la modificó y adaptó para la realidad y el contexto particular de universidades, centros de formación técnica e institutos profesionales.
La Universidad Austral de Chile ha comprometido en septiembre de 2021 a cumplir las 116 metas relacionadas a la gobernanza, la cultura organizacional, la academia, la gestión operativa de los campus y la vinculación con el medio y responsabilidad social. Ya teníamos un primer APL exitoso implementado entre 2013 y 2020. Este segundo APL es muchísimo más ambicioso y les compete colaborativamente a todas las unidades de la UACh desarrollar las acciones con el fin de alcanzar la certificación.
Su importancia es enorme por cuanto nos permite hacernos cargo éticamente de las transformaciones que se requieren para aportar al país y al mundo, profesionales con conciencia social y ambiental que puedan enfrentar las problemáticas cada vez más complejas que como sociedad estamos enfrentando. Es imprescindible que la comunidad completa se involucre y apoye esta transformación que nos convertiría en una universidad madura, resiliente y responsable socioambientalmente.
