En la actividad, organizada por la Sociedad Chilena de Geriatría y Gerontología, los docentes expusieron sobre importantes temáticas del área y pudieron compartir diferentes saberes y experiencias, conocer avances científicos y tecnológicos generados en el ámbito de la Geriatría y la Gerontología y establecer redes interdisciplinarias que permitan seguir contribuyendo a que todas las personas, sin distinción, envejezcan con calidad, derechos, oportunidades y participación, valorando lo construido a lo largo del curso de sus vidas.
La presentación del Dr. Fernando Peña, académico de la Escuela de Graduados de la Facultad de Medicina, que también se desempeña como profesional en el Hospital Base Valdivia, estuvo basada en la relación que existe entre las Unidades Geriátricas de Agudos (UGAs) y la docencia de pre y post grado, a raíz de la reciente puesta en marcha de la UGA, en el Hospital Base de Valdivia.
“Debemos generar más espacios para el desarrollo de la geriatría y así llevar sus beneficios a las personas mayores, en particular en el sistema público, y exponer a los profesionales de la salud a la geriatría desde etapas tempranas de su formación. Las UGAs, son un espacio ideal para la implementación tanto de modelos asistenciales como docentes en este ámbito, dado que es el nivel asistencial geriátrico con mayor evidencia en mejorar resultados clínicos a largo plazo como funcionalidad y calidad de vida luego de una hospitalización por alguna enfermedad”, sostiene el Dr. Peña.
Respecto de la participación en el congreso, resaltó: “Fue una instancia ideal para mostrar el trabajo que hemos desarrollado en el Hospital Base de Valdivia en conjunto con la UACh, en la implementación de la UGA y en la docencia de pre y post grado, así como resaltar la importancia de desarrollar investigación clínica y primaria en la persona mayor, para lo cual contamos en el Congreso con la participación del Profesor José Sarmiento, también académico de nuestra Universidad.”
De esta manera, el académico del Instituto de Fisiología Dr. José Sarmiento, expuso sobre la importancia de incorporar los ritmos circadianos dentro de las temáticas a tener en cuenta para el bienestar y la prevención en salud de las personas mayores.
“Los cambios cíclicos que experimenta las condiciones del ambiente y cuyo tiempo de duración es cercano a 24 horas, como por ejemplo la alternancia entre el día y la noche, se les denomina ritmos circadianos. En este ambiente caracterizado por presentar cambios predecibles en el tiempo, como es que a cada día le sigue una noche, es donde realizamos a lo largo de las horas las distintas actividades entendemos son necesarias para nuestro bien estar como individuos y sociedad como son el dormir, alimentarnos, realizar actividad física, sostener contacto social, recibir educación, trabajar y reproducirnos como especie. Así también, estos ritmos circadianos son claramente reconocibles a lo largo de los sucesivos días que envejecemos”, explicó.
Y, destacó: “En la estructura de sociedad moderna, la excesiva exposición a la luz de origen artificial durante la noche altera los ciclos naturales de luz y oscuridad. Se sabe que, esta exposición a contaminación por luz artificial durante la noche tiene efectos negativos en la salud humana, que estos efectos adversos se pueden presentar incluso desde el vientre materno y que el mecanismo por el cual impactan negativamente nuestra salud es que afectan al reloj molecular presente en cada una de nuestras células impidiendo que estas sincronice su funcionamiento de modo que nuestro organismo se adapte exitosamente a los cambios rítmicos que ocurren en el ambiente. Sin embargo, se desconoce cómo esta disrupción del reloj molecular endógeno, denominada cronodisrupción, afecta al proceso de envejecimiento y por lo tanto cuales son los efectos que tiene sobre la salud de la persona mayor.”
Del congreso, remarcó que: “La generación de conocimiento a través de la investigación básica y su discusión con la comunidad abocada al manejo clínico de la salud de la persona mayor, como es el caso de este congreso, permite además de la difusión del conocimiento respecto a los efectos adversos sobre la salud asociados a los horarios y condiciones en que iluminamos artificialmente nuestros hogares, calles, salas de clases, oficinas y hospitales, etc. el avanzar en el diseño de estrategias no farmacológicas para la prevención en salud a través de la educación respecto hábitos saludables de exposición a luz artificial y el diseño de intervenciones que utilicen luz para estimular el correcto funcionamiento del reloj biológico como terapia para los problemas de salud física y mental asociados a la creciente población de personas mayores.”
Por su parte, la Dra. Carolina Guzmán, valoró la incorporación del cáncer en la geriatría, y sostuvo. “La oncogeriatría es un área que se encuentra en constante evolución y en los últimos años ha tenido avances significativos en la comprensión y tratamiento del cáncer en la persona mayor, con el fin de desarrollar modelos de atención integral con colaboración interdisciplinaria. Se proyecta como un campo dinámico con un enfoque en mejorar la atención y los resultados de las personas mayores con cáncer.”
Además, como parte de la organización del evento, moderador en mesas científicas, presidente del comité científico y evaluador, participó el académico del Instituto Ciencias del Movimiento y la Ocupación Humana, Dr. Mauricio Lorca, quien además expuso la charla: “Experiencia de uso de realidad virtual inmersiva en la Persona Mayor”, en el módulo en el módulo de Innovación.