Reconocer la historia de la UACh, implica valorar los aportes de todas las personas que han contribuido a consolidar a esta casa de estudios como una de las más importantes de nuestro país. Sin embargo, lo anterior también significa ser conscientes de la difícil situación que estamos viviendo en un contexto nacional muy desafiante.
La crisis de gobernanza, sumado a nuestra fragilidad financiera, son parte de las razones que me llevaron a asumir la conducción de la UACh. Este año, ha estado marcado por la implementación del Plan de Recuperación (PdR). Su ejecución ha sido posible gracias al trabajo colectivo y compromiso de una comunidad integrada por académicos, funcionarios y estudiantes.
Mi propuesta de Programa de Gobierno ha sido trabajada de manera colaborativa y tiene como objetivo que, cautelando los avances del PdR y reconociendo las complejidades derivadas de su aplicación, la UACh avance con decisión en un proceso de modernización colectivo y significativo con el fin de asegurar:
i) La Sostenibilidad del Proyecto Educativo de Largo Plazo
ii) Mantener la Acreditación de Excelencia
Creo que debemos renovar una visión colectiva de Universidad que sea capaz de integrar y enfrentar los complejos retos del Sistema de Educación Superior. Creo que debemos guiarnos y dejarnos inspirar por los fundadores de nuestra Universidad, quienes estaban convencidos de que hacer las cosas bien es el camino más directo a la excelencia. Tengo la profunda convicción de que desde la Rectoría podré seguir aportando a la UACh, con un equipo de trabajo sólido y dedicado. Me comprometo a realizar una gestión dialogante que es imprescindible para fortalecer ese trabajo y nuestras relaciones internas.
3.- Los Principales Ejes de Acción
Los ejes de acción del Programa se basan en las siguientes consideraciones:
i) La sostenibilidad financiera es una condición fundamental para el funcionamiento académico de nuestra Universidad, a corto y largo plazo. La sostenibilidad financiera no solo está comprometida en el PdR, también es una exigencia del sistema nacional de educación superior, y, en especial, de sus reglas de acreditación. Las políticas de financiamiento de la educación superior están orientándose claramente a fomentar una mayor eficiencia en el desempeño de las universidades.
ii) Además, el sistema de acreditación institucional ha priorizado recientemente la sostenibilidad financiera y fortalecido significativamente la importancia del aseguramiento de la calidad.
iii) La crisis de gobernanza ha sido determinante en el deterioro financiero de la Universidad, en el debilitamiento de sus herramientas de control y de su capacidad de respuesta.
iv) La implementación del PdR ha generado tensiones internas y algunos impactos indeseados que debemos solucionar.
v) Por diversas causas, la Universidad ha perdido competitividad en el nivel regional, nacional e internacional; y requiere reposicionarse y recuperar su influencia histórica.
Los ejes de acción (Figura) buscan consolidar las bases instaladas durante el período de ejecución del PdR (1 y 2), y avanzar hacía los principales desafíos (3, 4 y 5) transitando desde el PdR hacia la nueva planificación estratégica, lo que será de vital importancia para proyectar nuestro futuro fortaleciendo el sentido académico de excelencia de nuestra Universidad.
Los ejes deben ordenarse y priorizarse en un marco temporal enfocado en: i) la sostenibilidad de mediano (seguimiento de la SES hasta el 2028) y largo plazo, ii) el fortalecimiento de nuestras relaciones internas y iii) la modernización institucional. Ello nos permitirá encarar en mejor pie un nuevo proceso de acreditación, que será desafiante no solo por las crisis que hemos atravesado, sino también por la mayor exigencia del nuevo sistema de acreditación.
Este programa no es solo una hoja de ruta: es una invitación a trabajar activamente por el futuro de nuestra Universidad. Si compartes esta visión, te invito a ser parte del camino.
José Dörner Fernández
Candidato a Rector