En su edición correspondiente al período marzo-abril de este año, la revista Hatchery International destaca el trabajo de investigación que se desarrolla en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UACh, en relación con la industria salmonera.
“Diseño de alta bioseguridad”, se titula el reportaje que habla sobre ensayos clínicos del salmón de Chile, el cual establece un nuevo estándar en investigación de enfermedades de los peces.
Hatchery International es el único periódico especializado dedicado exclusivamente a la cría temprana (incubación/hatchery) en el sector de la acuicultura.
Ensayos clínicos
El artículo señala que “La industria salmonera chilena ha alcanzado un momento crucial en su lucha contra enfermedades devastadoras. En el centro de este esfuerzo se encuentra Salmon Clinical Trials, el primer laboratorio húmedo universitario de alta bioseguridad del país diseñado específicamente para ensayos clínicos experimentales con patógenos del salmón. Esta instalación de vanguardia, dirigida por Ricardo Enríquez, representa un importante salto adelante en la comprensión y la lucha contra los patógenos que amenazan a los peces de cultivo, garantizando un futuro sostenible para uno de los principales sectores de exportación de Chile”.
Agrega que los ensayos clínicos en salmónidos es una iniciativa que data del año 2010 en la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Austral de Chile, impulsada por el Dr. Ricardo Enríquez Saiz, “cuando los investigadores reconocieron la urgente necesidad de contar con una unidad especializada para realizar ensayos clínicos en salmónidos”.
“El área de ensayos clínicos es la piedra angular del trabajo del laboratorio, ya que permite a los investigadores estudiar patógenos en condiciones estrictamente controladas. La instalación cuenta con ocho sistemas hidráulicos independientes, cada uno con tres tanques de un metro cúbico. Esta configuración permite realizar ensayos por duplicado o triplicado, lo que garantiza la fiabilidad de los resultados”, agrega.
“El diseño evita la contaminación cruzada, incluso cuando se analizan simultáneamente distintos patógenos», explica Enríquez. Además, el sistema de filtración del laboratorio, que utiliza filtros mecánicos, zeolita y carbón activado recircula el 100% del agua, con cambios parciales de agua en función de la presión de la biomasa”, se destaca en el reportaje.