Durante el seminario expuso en un panel la Ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, quien abordó la institucionalidad pública y proyección del acuerdo de Escazú en Chile.
En un ambiente emotivo de reflexión y conmemoración se realizó el seminario “Defensores Ambientales, Lecciones y Oportunidades bajo el Acuerdo de Escazú: A 20 años del desastre ambiental del río Cruces”, encuentro que se llevó a cabo el jueves 07 de noviembre en el Hotel Puertas del Sur de Valdivia y fue organizado por la Seremi de Medio Ambiente de Los Ríos con apoyo de la Universidad Austral de Chile. (Ver transmisión aquí).
Este encuentro -trasmitido por Radio UACh- se propuso ser una instancia para reflexionar juntos acerca de cómo el activismo ambiental puede contribuir decisivamente a transformar la institucionalidad y mejorar las políticas públicas en materias de medio ambiente, analizar el contexto y los desafíos que planteó la creación del Ministerio del Medio Ambiente con sus protagonistas directos, y como se perfila la implementación de Escazú en este escenario socioambiental cada vez más dinámico.
El seminario contó con la asistencia de autoridades regionales, invitados y expositores, y en su inauguración el Delegado Presidencial de la Región de Los Ríos, Jorge Alvial, destacó que se espera que la capital regional se transforme “en una de las ciudades humedales del mundo, lo que tiene como propósito reconocer el ecosistema, la historia, las condiciones naturales que tenemos y la belleza y el desarrollo que nosotros podemos tener para hacer más grande a Valdivia de lo que ha sido en toda su historia que se acerca a los 500 años”.
El Seremi de Medio Ambiente de Los Ríos, Alberto Tacón, explicó que “el objetivo de este seminario fue cumplir con el plan de implementación participativa del Acuerdo de Escazú, el que se empezó a formular desde el momento en que el gobierno del Presidente Gabriel Boric le puso prioridad y logró su ratificación por el Parlamento. En ese plan se indica que el Estado reconocerá formalmente la labor de los defensores ambientales”.
Por su parte, la Alcaldesa de Valdivia, Carla Amtmann, indicó que no solamente hay que “tomar las lecciones de lo que implicó el movimiento hace 20 años sino que el desafío de cómo esa comunidad organizada y con un nivel de consciencia ambiental relevante la incorporamos en nuestros procesos normativos y de toma de decisiones”.
En tanto el Rector de la UACh Dr. José Dörner, destacó que “para la Universidad Austral de Chile es muy relevante reflexionar sobre el rol que cumplen los movimientos sociales, la institucionalidad ambiental y el aporte de la ciencia y la tecnología en el cuidado del medio ambiente y la sustentabilidad. Esto es un sello de nuestra Universidad que debemos cuidar y cultivar”.
En la actividad también estuvo presente la Seremi de Ciencia de la Macrozona Sur, Maite Castro.
Reconocimiento a movimiento ciudadano
En noviembre de 2024 se conmemoran 20 años del inicio de uno de los conflictos socioambientales que más profundamente ha marcado el desarrollo de la institucionalidad ambiental y el rol de los defensores ambientales como agentes de cambio en nuestro país.
En noviembre de 2004 se conformó el movimiento ciudadano Acción por los Cisnes, que hizo uso de las diferentes herramientas legales y administrativas disponibles para asegurar el deber del Estado de garantizar un medio ambiente libre de contaminación y tutelar la preservación de la naturaleza, denunciando públicamente la situación y logrando visibilizar este grave conflicto ambiental a nivel nacional e internacional.
En el Plan Nacional de Implementación Participativa del Acuerdo de Escazú (PIPE), se establece como acción de su línea estratégica n°4 “reconocer públicamente la labor y el aporte de las personas, grupos y organizaciones que promueven y defienden los derechos humanos en asuntos ambientales, contribuyendo al desarrollo de una cultura en favor de un medio ambiente sano, el fortalecimiento de la democracia, los derechos de acceso y el desarrollo sostenible”.
Concretamente fue la Ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, quien hizo entrega de este reconocimiento del Estado a los defensores ambientales del movimiento ciudadano Acción Por los Cisnes, quienes recibieron simbólicamente una acuarela del artista local Antonio Oyarzún, la que retrata a esta bella ave acuática que posee un enorme significado en Valdivia y en la Región de Los Ríos.
El seminario comenzó con un primer panel en el cual expusieron José Araya y Claudia Sepúlveda, dirigentes que lideraron Acción por Los Cisnes, quienes ahondaron en el contexto histórico, la diferentes herramientas de incidencia ciudadana que utilizaron y cómo lograron relevar los temas ambientales en el debate público.
En el segundo panel la Ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas, abordó la institucionalidad pública y proyección del acuerdo de Escazú en Chile; mientras que el Seremi de Justicia y Derechos Humanos de Los Ríos, Jorge Ríos, se refirió al protocolo de protección de las personas defensoras de derechos humanos en el marco del artículo 9 del Acuerdo de Escazú.
La Ministra compartió una visión de cómo se ha ido transformando la institucionalidad ambiental en sus 30 años de creación. “Es muy evidente de que lo que ocurrió en Valdivia hace 20 años es un hito gatillante en la transformación muy relevante, por lo tanto, quisiera agradecer el trabajo que se dio allí y que continúa porque sin la acción de una sociedad civil organizada estas transformaciones institucionales no hubiesen ocurrido”, dijo.
En el tercer panel expusieron la Fiscal Regional de Los Ríos, Tatiana Esquivel, quien se refirió a la persecución penal de los delitos ambientales en Chile. Por su parte, la Superintendenta del Medio Ambiente, Marie Claude Plumer, abordó la gestión de esta institución, específicamente en lo referido a fiscalización y sanción.
Por último, el cuarto panel estuvo a cargo de Universidad Austral de Chile, a través de la Directora del Centro de Estudios Ambientales (CEAM), Andrea Pino, y del Coordinador Científico del Centro de Humedales (CEHUM), el que surge como parte de las medidas tras el desastre ambiental en el Humedal del Río Cruces, desarrollando un modelo de gobernanza por medio de las cámaras ciudadanas, científicas y productivas.