¿Cuáles fueron los objetivos que se plantearon al comienzo de su periodo?
Los objetivos eran muchos, pero los más destacados consideraban la restructuración de la Facultad de Ciencias Veterinarias, la renovación de la planta académica, la mejora de los índices en investigación, la acreditación de la carrera de Medicina Veterinaria por parte de la CNA y de ARCUSUR, así como también la acreditación de los programas de postgrado.
¿Cuál es el balance en el cumplimiento de estos objetivos?
Yo diría que gran parte de esos objetivos se cumplieron; sin embargo, una de las cosas que nos dejo insatisfechos fue que no logramos que la CNA nos acreditara por siete años, sólo lo hizo por seis, lo cual considero injusto, ya que la misma carrera en la Universidad de Chile obtuvo el máximo, y ésta no es de ninguna manera mejor que la nuestra.
Otra de las deudas es el mejoramiento de la calidad del pregrado, es decir cuando uno tiene una renovación tan importante en la planta académica, donde se incorporan profesionales jóvenes, muchos de ellos con poca experiencia en este ámbito, es difícil pedirles que además de la investigación, postgrado y extensión, hagan también un cambio sustancial en la calidad de pregrado; eso es algo con lo que reconozco hemos quedado en deuda, pero que indudablemente esta nueva decanatura lo tomará y lo tomará con fuerza.
También, existe una deuda histórica de la Universidad con la Facultad en el mejoramiento de la infraestructura, nosotros presentamos un proyecto de mejoramiento el cual tuvo buena acogida de parte de Rectoría, pero al parecer ha faltado más voluntad de rectoría así como también recursos. Los directivos de esta casa de estudios deben comprender que no podemos seguir haciendo clases en edificios que nacieron con la universidad, es una necesidad que apunta directamente a favorecer la calidad de la enseñanza.
¿Cuál ha sido el sello que su Decanatura ha imprimido a la Facultad de Ciencias Veterinarias?
Algo que hemos tratado de impulsar en la Facultad es el mejoramiento de los índices de ejecución de proyectos de investigación y de publicaciones científicas. Pienso que la Facultad se abrió a nuevas propuestas de fondos concursales, esto a través de la Oficina de Gestión de Proyectos, lo que nos ha permitido vincularnos mucho más con las necesidades del medio, presentando iniciativas de interés público y para las empresas.
¿Cómo cree que se proyecta la Facultad?
Creo que vienen momentos muy complicados, la desregularización que hay en el sistema universitario es tremenda y eso ha hecho que se creen una cantidad de carreras de Medicina Veterinaria que no tienen ninguna relación con las necesidades del país, por lo mismo los estudiantes han bajado su interés por postular a la carrera, ellos perciben que es una carrera cara y que cuando se titulen sus expectativas salariales no serán las esperadas. Y lo otro que estar en regiones siempre será una situación de desmedro para nosotros, moverse desde Santiago es muy caro y no hay todavía ninguna iniciativa de los gobiernos en el sentido de favorecer la movilidad de la capital a las regiones.
Al dejar la dirección de esta unidad ¿A quienes quisiera agradecer?
Uno como Decano entrega las directrices para que se alcancen determinados objetivos, pero lo alcanzado es un logro de los académicos de esta Facultad, por lo tanto agradecerles a todos los colegas su quehacer y en lo particular, agradecer a mis dos directivas las cuales fueron muy colaboradoras, en ellas pude delegar funciones sabiendo que la tarea se iba a realizar, eso otorga una gran tranquilidad. Me voy tranquilo y autocritico.
¿Cómo ve a la Facultad en diez años más?
Los estudiantes plantearon demandas el año pasado en las cuales concordamos, excepto en la forma en cómo estas fueron planteadas, ellos dijeron que había que cambiar el sistema y de a poco el gobierno se está dando cuenta que el sistema no resiste más, que debe haber una regulación.
En un país chico como el nuestro, donde la ganadería no es la actividad más importante no nos podemos dar el lujo de tener 32 escuelas de Medicina Veterinaria, cuando en Estados Unidos hay 26, es decir algo está mal, por lo tanto creo que vendrán regulaciones y se cerraran carreras, pero habrán algunos años todavía de inestabilidad y la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UACh deberá hacer grandes esfuerzos en difundir lo que es en el contexto nacional e internacional.
Ver vídeo aquí: http://www.youtube.com/watch?v=EyeEhADWyQo&feature=youtu.be