<p align="justify">Daniela Bustos y Ricardo Bonert cursan cuarto años de la carrera de Agronomía en la <strong><a href="http://www.uach.cl">Universidad Austral de Chile</a></strong>, sin embargo para ellos este año ha significado un doble desafío. Junto a sus habituales responsabilidades académicas, han debido dedicar parte importante de su tiempo libre a prepararse física y mentalmente para competir en lo que se ha transformado su nueva pasión, las carreras de aventura.</p><p align="justify">Todos los meses Daniela y Ricardo ponen a prueba su preparación y se exigen al máximo de sus capacidades en carreras que combinan trekking, bicicleta de montaña y kayak. Ambos compiten en la categoría dupla amateur contra veintiún equipos más, todos de la zona central, en carreras que duran 14 horas seguidas.</p><p align="justify">¿Qué los llevó a dedicarse a un deporte tan nuevo en nuestro país y tan exigente a la vez? Ricardo señala que es una mezcla de su pasión por el deporte y su gusto por la naturaleza. En un comienzo creyó que sería difícil practicarlo debido a la complejidad que representa la navegación en ruta, sin embargo conoció a Felipe Baeza, estudiante de Bioquímica de la UACh que había participado el año pasado en estas competencias, y junto a Daniela, formaron el equipo ANtártica-Yo Tomo Leche. "Él me contó su experiencia, que andaba buscando gente para formar un equipo, los dos conocíamos a Daniela y así surgió la idea de armarlo. Conseguimos auspicios y patrocinios y finalmente decidimos correr las ocho fechas del campeonato". Actualmente Felipe se encuentra en EE.UU., por lo que hasta octubre, sólo Ricardo y Daniela deberán llevar el peso del equipo.</p><p align="justify">Pero competir catorce horas ininterrumpidas requiere un entrenamiento constante y una gran fuerza de voluntad. "Salimos entre cinco y seis veces a la semana a entrenar. Trotamos siempre acá, andamos en kayak en el río y vamos a hacer bicicleta al cerro Oncol", cuenta Ricardo. Respecto al tiempo que le dedican y su compatibilidad con los estudios, dice: "Tratamos de organizarnos. Siempre hemos hecho harto deporte los dos, así que no ha sido tan difícil. Lo que sí nos complica bastante es el clima. Cuando llueve mucho nos corta los entrenamientos".</p><p align="justify">Pero las complicaciones que deben sortear no terminan ahí. Debido a la extensión de las carreras y a que todas se realizan en la zona central, deben dedicar aproximadamente cuatro días exclusivos para viajar, descansar, competir, regresar a Santiago y emprender la vuelta a Valdivia. "Para los de Santiago es sólo el día de la carrera el que tienen que dedicar, en cambio para nosotros es partir el jueves, dormir en el bus, esperar todo el día la carrera que empieza a las doce de la noche y competir catorce horas seguidas, es el doble de desgaste", confiesa Ricardo.</p><p align="justify">En la última carrera, Ricardo y Daniela compitieron por primera vez juntos, ya que en las dos primeras fechas cada uno tuvo de acompañante a Felipe, quien los inició sobre todo en la parte de navegación, que reconocen es la parte más complicada. En la tercera fecha disputada entre el 4 y 5 de julio terminaron en el noveno lugar y ya se aprontan a lo que será la cuarta jornada. Al respecto Daniela afirma: "Quedamos con hartas ganas de que en esta carrera nos vaya mejor, porque esperábamos un mejor resultado. Siento que estamos haciendo las cosas bien. Nos orientamos bien y llegamos bien a los puntos, que es importante porque es lo más difícil".</p><p align="justify">Desde el punto de vista de la relación con el compañero, este deporte también representa un gran desafío y eso lo pudieron vivir en carne propia como dupla debutante. "El hecho de estar tan cansado de repente hace difícil conservar la calma y no retarse, por eso hay que intentar apoyarse constantemente, porque la parte anímica también juega un papel fundamental cuando estás medio perdido, cansado, mojado y con hambre", afirma Ricardo.</p><p align="justify">Pese a todo, la satisfacción al final de la competencia -afirman- es incomparable. "Es tan rica esa sensación de saber que diste lo mejor de ti que apenas te repones y llegas a tu casa te olvidas de todo el cansancio y quieres partir a otra carrera ese mismo día", confiesa Daniela.</p>