Entre el 7 y el 20 de diciembre 13 estudiantes de Ingeniería Forestal participaron activamente de la práctica que se realiza durante el séptimo semestre de la carrera y que tiene por objetivo caracterizar e interpretar el recurso bosque integrando aspectos de calidad de sitio, florísticos, dasométricos, sanitarios y ecosistémicos en dos escenarios de bosques: plantaciones y bosque nativo. La actividad estuvo a cargo del Dr. Oscar Thiers, como profesor responsable, y contó con el apoyo en calidad de profesores colaboradores de los Drs. Mauro González y Rodrigo Morales.
“Los estudiantes, conformando grupos de trabajo, planificaron y desarrollaron, de acuerdo con el objetivo de la práctica, una serie de actividades en torno al recurso forestal, bosque nativo y plantaciones. Tema central e ineludible fueron los conceptos de dinámica de bosques, especialmente de los bosques de Nothofagus, donde el predio posee “in-situ” situaciones únicas con diferentes estados o fases de desarrollo de los bosques nativos de Chile, que los estudiantes han conocido y aprendido previamente sólo de manera teórica”, explicó Thiers.
Agregó que “se experimentó el proceso de regeneración natural de un tipo de bosque nativo. También, y bajo un soleado día, se realizó un recorrido, de aproximadamente 8 kilómetros de un transecto altitudinal para analizar la variación de la vegetación. Partiendo desde los 600 y hasta los 1.200 metros sobre el nivel del mar (m snm), los estudiantes fueron evidenciando la variación de las especies arbóreas y arbustivas más representativas de los bosques nativos de esta región de Chile”.
Estudiantes
Para los estudiantes que participaron de esta experiencia ésta resultó enriquecedora. “Fue una de las mejores experiencias vividas tanto en lo académico como en los lazos de amistad formados y el compañerismo generado en el grupo de estudiantes. Logramos integrar en terreno lo aprendido en las aulas de nuestra casa de estudios”, señaló Catalina Puente. La estudiante añadió que “esta práctica nos enseñó a observar, analizar e interpretar la realidad de los distintos tipos de bosques presentes en este predio, además de poner en práctica la elaboración de planes de trabajo en equipo preparándonos de forma óptima como futuros profesionales”.
Asimismo Patricia Medina explicó que “como Ingeniero Forestal aprendes el funcionamiento de la dinámica y la ecología de las especies ante ciertas limitantes, y cómo puede variar el comportamiento natural de un bosque cuando las condiciones lo permiten. Por otro lado te dispones a trabajar en equipo, a desarrollar ideas y aprobarlas en conjunto, como preparación a la realidad de un mundo laboral, donde la aplicación de ideas permite decidir la más adecuada para el funcionamiento de la actividad a desarrollar, creando lazos con los compañeros y futuras relaciones al conocer las habilidades de cada uno”.
A esta actividad también asistieron dos estudiantes de la Universidad Albert-Ludwig de Freiburg (Brsg.), Alemania, quienes se encuentran de intercambio en la UACh.
San Pablo de Tregua
El predio San Pablo de Tregua, desde mediados de los ochenta, ha albergado a generaciones de estudiantes de Ingeniería Forestal durante los meses de verano para experimentar un trabajo multidisciplinar, en condiciones de trabajo de terreno y convivencia muy particulares. San Pablo de Tregua se ubica en la precordillera de los Andes, cercano a la cuidad de Panguipulli (25 km). Se accede por un camino vecinal y posee una superficie de 2.200 hectáreas de bosques, en su mayoría cubiertas por diversas situaciones de bosque nativo de los tipos forestales roble-raulí-coigüe y coigüe-raulí-tepa. También existen plantaciones forestales, las cuales muestran su desarrollo en condiciones climáticas extremas.