El pasado miércoles 17 de abril en la Sala Saelzer de la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales, el investigador de la Universidad de Padua, Italia, Dr. Lorenzo Picco, dictó la charla: “La evolución de las mediciones morfológicas del medio ambiente: utilización, empleo y potencialidad del Terrestrial Laser Scanner (TLS)”, en el marco del proyecto Fondecyt 1110609 “Stream channel morphology, sediment and large wood transport and ecological evolution patterns following natural disturbance processes, with special emphasis in post-eruption Chaitén volcanic river systems” , del cual es responsable el académico de la UACh, Dr. Andrés Iroumé.
En la oportunidad, el especialista en hidrología, presentó una introducción sobre los distintos instrumentos que han sido utilizados a lo largo de los años para el levantamiento topográfico, como teodolita o triplometros. “También para medir distancias hay diferentes tecnologías desarrolladas en los últimos tiempos, desde los más simples hasta los que utilizan un prisma que permite la medición de puntos”, explicó el investigador, entre ellos se encuentran los niveles, las estaciones totales, que se asimila más al TLS ya que permite hacer mediciones detalladas y precisas; los GPS y los DGPS. Otros instrumentos útiles son las fotografías aéreas, con las cuales se trabaja de forma muy rápida grandes áreas, y la tecnología Lidar, que trabaja como un láser arriba de un avión o helicóptero.
Laser Scanner Terrestre
“El TLS es la mayor tecnología que hasta ahora existe, proporciona un nivel máximo de detalle porque se ubica en el suelo y nos permite elegir cuánta densidad queremos en un área determinada para definir diferentes niveles de detalle”, indicó, “Con los datos obtenidos se puede hacer todas las evaluaciones y cálculos que nos permitirán entender mejor el terreno, el medio ambiente donde se trabajará”.
El TLS es considerado como una estación total motorizada y a elevada automatización que puede tomar millones de puntos en poco tiempo. Éste se constituye de un sensor laser posicionado sobre un trípode y un medio de control (laptop). “Se pueden tomar las mediciones una sola vez y trabajar con estos datos como si se hubiese salido a terreno muchas veces. Es como congelar el ambiente”, explicó. Las únicas desventajas que posee el equipo son su alto costo, el peso de los instrumentos, la necesidad de electricidad o demasiadas baterías, y el hecho de que no trabaja con lluvia o nieve. Su potencialidad abarca los ámbitos arquitectónicos, de ingeniería, topográficos, ecológicos, y de investigación científica, entre otros.
Luego, el equipo fue instalado y utilizado en terreno frente a los asistentes. Se tomaron imágenes, las que más tarde fueron analizadas.