El 20 de noviembre de 1989, la ONU logró la ratificación internacional de la Convención de los Derechos del Niño. En tanto que Chile, adhirió a ella un año después, en agosto de 1990. Este hito, puso desafíos a nuestro país, en transformaciones culturales y políticas, para el reconocimiento de las niñas y niños como sujetos de derechos, y, por otro lado, demandó la consideración de altos estándares respecto de la promoción y protección de los derechos en la infancia, incluyendo el requerimiento de dar cuenta del cumplimiento de lo dispuesto en la convención, a través de informes sobre lo realizado.
A pesar de que han transcurrido tres décadas de que dicha convención estableció los marcos éticos, políticos y legales en el cuidado de la infancia, y que supone el bien superior de niños y niñas como prioridad, ellos y ellas siguen siendo invisibilizados en nuestro país, reconociendo con esto que tenemos una enorme deuda.
Esta realidad es expuesta a través de los medios de comunicación, a partir de acciones de discriminación y vulneración. No está demás decir que, muchas veces dicha exposición raya en lo antiético, pero que, al mismo tiempo, nos presenta una sociedad chilena injusta y adultocéntrica. De esta manera, asumiendo una realidad crítica, cabe preguntarse, cuánto falta para crear cultura de participación y respeto para niñas y niños, generando conciencia de que son sujetos con agencia política, cultural y afectiva. Necesitamos una sociedad que promueva y garantice el reconocimiento de niños y niñas, rescatando la responsabilidad del Estado, desde un marco de valoración. Como una forma de contribuir a la construcción de una sociedad más justa, democrática e inclusiva para la infancia, desde el 22 al 26 de noviembre, la Universidad Austral de Chile, en conjunto con la subsecretaría de Educación Parvularia, desarrollarán la Semana Regional de la Infancia. En su quinta versión , el foco estará en la promoción del derecho a jugar y aprender . Desde ya la invitación queda abierta a quienes quieran participar de esta instancia y contribuir en la promoción y protección de los derechos de la infancia en nuestra región.