– Cabe destacar que con la novela «La Burla del Tiempo» Electorat obtuvo el Premio Biblioteca Breve de Seix Barral en el 2004. El escritor tiene un amplio conocimiento de la industria literaria, pues trabajó como lector de originales en la reconocida agencia de Carmen Balcells (España).
Con gran desparpajo y honestidad, el destacado escritor Mauricio Electorat habló sobre literatura,biografía e industria cultural, durante la charla «+La muerte de la novela?» que dictó el viernes 22 de septiembre a las 19.00 hrs. en la Sala Multipropósito del Museo Histórico y Antropológico UACh.
Esta actividad se enmarcó dentro de una nueva versión del ciclo «Museo Parlante» organizado por la Dirección Museológica de la Universidad Austral de Chile y que busca abrir espacios de debate y análisis sobre las artes y humanidades.
Introdujo al invitado el profesor de literatura hispanoamericana Luis Bocaz (académico de la Facultad de Filosofía y Humanidades UACh), quien planteó la relación entre historia, biografía personal y literatura, que se da en el mundo narrativo de Mauricio Electorat.
En ese marco puso énfasis en analizar la novela «La Burla del Tiempo» que aborda la infancia y adolescencia de Electorat en Chile, cuando «la revolución estaba al alcance de la mano», existía un ideal bolivariano y con ello América Latina había entrado a escena.
Igualmente mencionó antecedentes biográficos de la vida del escritor en Barcelona (donde fue lector de originales en la agencia literaria de Carmen Balcells) y en París, donde le fue de gran utilidad el idioma francés aprendido en Santiago.
Biografía y Literatura
El escritor Mauricio Electorat centró gran parte de su conferencia en aspectos personales que se vinculan a sus obras literarias. Por ejemplo su adolescencia bajo la dictadura de Pinochet, la efervescencia política en la que vivían los jóvenes de aquel entonces y su identidad de chileno de clase media que estudió en un colegio pagado.
Respecto a su laureada novela «La Burla del Tiempo» explicó que trata de dos historias que se entrelazan y donde se produce un singular encuentro en París entre una víctima de la Dictadura y la persona que lo denunció en la universidad 20 años atrás.
«Víctima y victimario comparten más de lo que sospechan. Ambos comparten la memoria de un país que ya no existe y que los vincula como imágenes opuestas en el espejo», relató, refiriéndose al Chile actual, «tan desmemoriado y posmoderno».
Sobre su estadía en París (donde trabajó en diversos y singulares oficios), aseguró que en esta ciudad se encontró con una gran cantidad de vivencias inesperadas.
El Arte de Escribir
Apelando al título de esta charla, el escritor aseguró que «la novela goza de muy buena salud». Al mismo tiempo, y parafraseando a Borges, señaló que la novela «vive permanentemente preocupada de su propia desaparición».
Otro punto que abordó fue el proceso de escribir. Al respecto planteó que «uno nunca sabe lo que está haciendo cuando escribe» y que «uno trabaja con obsesiones, con historias a las que uno vuelve».
También se refirió a la industria cultural donde impera la velocidad vertiginosa. «La industria es un monstruo insaciable. El negocio es vender escritores y no libros, e importa poco la calidad literaria».
Mencionó que en París una novela tiene 15 días para imponerse y pasar desde el mostrador hasta los anaqueles. «+En el mundo hispánico será un mes», planteó.
Siguiendo ese mismo tema, recordó los momentos en que ganó el Premio Biblioteca Breve de Seix Barral. «El éxito es una pompa de jabón», dijo.