Curada por Lesly Fonseca y Rodolfo Peraza, la exposición ha sido asumida por el Centro de Arte Contemporáneo Wifredo Lam y el Centro de Desarrollo de las Artes Visuales como proyecto colateral a la Bienal, e indaga cómo la cultura de los videojuegos e internet han modificado radicalmente la política, la información y el arte en la actualidad, especialmente en su producción, distribución y recepción.
Oyarzún presenta en esta oportunidad Drifters, una obra que toma elementos del diseño especulativo para reflexionar sobre de la sociedad de consumo, el aislamiento, la frustración y la deriva. Desde cierta aproximación poética, la pieza se desarrolla como un código fuente escrito en pseudo-BASIC que describe un sencillo algoritmo lleno de evocaciones y supuestos en torno al uso que dar a una botella, cuestionándose respecto al propio proceso creativo como alternativa y posibilidad de cambio.
La muestra, que se inaugura el 19 de abril, reúne un conjunto de obras relacionadas con los amplios efectos de la industria del entretenimiento y la web como práctica artística y cultura contemporánea, contando con la participación de creadores de la talla de Vuk Cosic (Eslovenia), Yucef Merhi (Venezuela), Nina Coulson (Reino Unido), Filio Gálvez (Cuba), El Diletante Digital (Cuba), Rewell Altunaga (Cuba) , Naivy Pérez (Cuba), Serones (Cuba), Rodolfo Peraza (Cuba) y Hamilton Mestizo (Colombia).