Durante una semana alrededor de 150 investigadores, postdoctorantes, estudiantes de pre- y postrado compartieron experiencias y conocimientos sobre el impacto del Mount Saint Helens (EE.UU) en los diversos ecosistemas, volcán que ha sido ampliamente estudiado desde que hizo erupción.
Esta jornada, organizada por el ecólogo Charlie Crisafulli del Servicio Forestal, se realiza cada 5 años en el Mount St Helens National Volcanic Monument, correspondió al aniversario 35. Su convocatoria fue amplia ya que además asistieron cientistas sociales, historiadores y poetas “para obtener una mirada no solo desde la perspectiva ecológica, sino también humana, social y filosófica de lo que significó este evento”, indicó el profesor Dr. Mauro González.
Compartir lo aprendido durante las últimas décadas fue uno de sus objetivos más importantes, aunque también lo fue la incorporación de nuevas generaciones de investigadores y participación de estudiantes de colegio con gran interés en la ciencia, para que continúen con el trabajo que se ha realizado y/o generen nuevas líneas de investigación. En esta jornada participaron destacados investigadores pertenecientes a distintas disciplinas como Fred Swanson, Jerry Franklin, Virginia Dale, John Bishop, Roger del Moral, Joe Antos, John Major, Robert Parmenter, Mike Allen y el anfitrión Charlie Crisafulli, entre otros.
“Fue una oportunidad extraordinaria el compartir in situ con los propios autores las principales lecciones aprendidas luego de estos 35 años, que sin duda han hecho una contribución mayor en distintos campos de la ecología” explicó el Dr. González. Una de las actividades principales contempló la visita de un gradiente que muestra la fuerza del impacto de la erupción en la vegetación y otros ecosistemas. “La erupción del Mount Saint Helens tuvo distintos procesos asociados, uno fue la eyección de tefra (ceniza) y una enorme explosión lateral que generó una avalancha de detritos, lahares y coladas de barro aguas abajo. La explosión tuvo gran fuerza, volteando miles de hectáreas de bosque antiguo y en donde además perdieron la vida 57 personas”, señaló.
Colaboración
La colaboración entre la UACh -equipo compuesto por Drs. Antonio Lara, Carlos Jara, Oscar Thiers y Mauro González- y el equipo de trabajo del Servicio Forestal de Estados Unidos viene desarrollándose desde la erupción del volcán Chaitén en el año 2008, seguida posteriormente con la del cordón Caulle el año 2011. Diversas publicaciones y tesis de pre- y postgrado ha sido el resultado principal de estas investigaciones. Para fines de enero del próximo año está programada una nueva visita de este equipo, para continuar con el monitoreo post-erupción del volcán Chaitén y Caulle, y evaluar y monitorear el efecto que tuvo la caída de tefra sobre la vegetación y otros procesos ecológicos a consecuencia de la erupción del volcán Calbuco.