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“Convergencias, Miradas Valdivianas” se llama la exposición que reúne los trabajos pictóricos de los licenciados en artes visuales de la Universidad Austral de Chile Tatiana Martínez, Ignacio Traverso, y Esteban Matamala, que se inaugura este martes 26 de abril en Espacio Juventud Providencia (Manuel Montt 101) y que se podrá visitar hasta el 5 de junio.
Según palabras de la curadora Isabel Núñez, licenciada en artes visuales de la Universidad Austral de Chile, la muestra tiene como punto en común el arte y la naturaleza. Los jóvenes artistas han desarrollado su obra a partir de la selva valdiviana y lo que significa vivir en una ciudad lluviosa. “Desplazamientos naturales y pictóricos que se han dado en una ciudad con una pequeña superficie, en la que el agua predomina y fluye, sin interrupción. Desde este marco los artistas han elaborado un complejo entramado plástico y reflexivo desde el cual se construye su producción artística, que no ha perdido a la pintura y al dibujo como dirección”, dice Núñez.
Tatiana Martínez muestra una serie en la que la narrativa predomina sobre lo formal, historias desde las cuales la artista compone fragmentos de mitos locales, buscando a través de esto dibujar su propia identidad, captar las raíces desde las cuales se ha levantado, siendo nativa de su propia isla, internándose en la selva valdiviana y en algunas otras selvas latinoamericanas, ha sintetizado un imaginario prolífico y plenamente femenino.
Esteban Matamala, a través de un grabado contemplativo, dirige la mirada hacia acontecimientos pequeños y fundamentales que se levantan desde su cotidiano, su reflexión sobre lo aparentemente prosaico del día a día, se conforma a través de un collage de grabados que pertenecen a un archivo anterior. Acá la memoria participa construyendo el presente, articulándose en tanto operación plástica del devenir.
Ignacio Traverso encuentra en el arte de caminar, direcciones y puntos, que se convierten en los nodos de una cartografía abstracta. En esta errancia reflexiva, el ánimo se vivifica y la mente se libera, una actividad inútil que al igual que el arte, se despliega en un proceso de resistencia; rítmico, discontinuo y diverso.
Es así como se presentan entonces, tres estudios particulares, obras que con sus diferentes temperamentos, las que permiten respirar un poco y expandir el tiempo en visibilizando el contraste, con la ciudad de Santiago.