“Ballenera”. No es primera vez en la historia que se utilizaría este adjetivo para hablar de esta zona del país. Décadas atrás fue por el faenamiento de estos enormes animales en la histórica planta ballenera de Corral. Hoy, porque tal parece que las costas de la Región de Los Ríos vuelven a ser un lugar seguro para los cetáceos.
Así es, pues esta semana, por primera vez esta temporada, un grupo de investigadores de la Facultad de Ciencias de la Universidad Austral de Chile (UACh) y del Centro Ballena Azul (CBA), divisaron un grupo de ballenas azules en las cercanías de Curiñanco. Hasta allá llegan dos días cada semana para observar con binoculares e instrumentos más especializados si éstos, los animales más grandes del mundo, prefieren nuestras costas para alimentarse.
Hasta ahora, existe optimismo. Pero también cautela. La ballena azul necesita enormes cantidades de alimento (krill) para satisfacerse. Y en esta época del año recorre las costas australes en busca de ello.
Al parecer eso ocurrió esta semana, cuando un equipo de terreno, liderado por el investigador Jorge Ruiz, observaron un total de 16 de estos mamíferos marinos muy cerca de la costa Chaihuín y en Curiñanco. Fue el primer avistamiento de la temporada. “Fue claro y certero, porque los animales estaban bastante cerca de la costa”, destaca Ruiz. Y detalla entre risas: “se demoraron un poco, pero ya están aquí!!”. Esto les ha dado nuevas energías para continuar con la observación que durará hasta los meses de invierno.
Estos esfuerzos científicos se enmarcan en el proyecto FIC-GORE Los Ríos “Turismo de Intereses Especiales enfocado hacia el avistamiento de ballenas y otros cetáceos en la Región de Los Ríos: un estudio de factibilidad técnica”. Su investigador principal es el Dr. Rodrigo Hucke-Gaete, conocido nacional e internacionalmente por haber descrito, el año 2003, una zona de alimentación de ballenas azules en los mares de Chiloé y el Golfo del Corcovado, hoy reconocida como una de las más importantes a nivel mundial.
El proyecto FIC pretende evaluar la factibilidad técnica de un programa de Turismo de Intereses Especiales (TIE) ha ser desarrollado en la zona marino-costero en la región de Los Ríos. “Nuestro trabajo de más de 10 años se ha centrado mayormente en los mares australes -explica Hucke-Gaete-, por lo que es muy gratificante traer toda esa experiencia para prospectar el posible desarrollo de una industria de avistamiento de ballenas, que ha tenido un alto impacto en las economías locales en las zonas en donde se ha desarrollado utilizando buenas prácticas y por tanto, de manera sostenible”, enfatiza.
El avistamiento de ballenas emerge con gran fuerza en varias partes de Sudamérica pues es un tipo de turismo que atrae a gran cantidad de gente. Sin embargo, su práctica reviste ciertos riesgos para la fauna que se observa. Hucke-Gaete advierte que es crucial comprender los alcances de esta actividad sobre la conservación de las ballenas y cetáceos en general. “Se debe conocer si las ballenas se están alimentando o reproduciendo. Si están sólo de paso o permanecen por más tiempo”, especifica. Todo lo anterior, para diseñar un tipo de turismo que no sea invasivo y que no perjudique un proceso natural que ha costado mucho recuperar a nivel mundial
El esfuerzo científico de la UACh, el CBA y el GORE de Los Ríos apunta a aquello: a comenzar a entender qué hacen las ballenas en nuestras costas, y cómo podríamos usar su presencia en nuestro desarrollo, sin afectar su estado de conservación. Así, esta iniciativa producirá mapas de distribución de cetáceos a lo largo de todo el año de estudio a través de prospecciones marinas y terrestres; y generará un documento que sintetice la estrategia regional para el desarrollo de una industria de avistamiento de ballenas, a través del trabajo conjunto de actores privados locales, científicos y el gobierno regional.
Así es: la ballena azul, el animal más grande del plantea, está llegando a la costa de la Región de Los Ríos.
Centro Ballena Azul
El Centro Ballena Azul es una ONG sin fines de lucro, fundada el año 2000 por un grupo de jóvenes biólogos preocupados por ampliar su impacto científico en pro de la conservación de los ambientes marinos y de especies como la ballena azul, el lobo fino de Juan Fernández, los delfines chileno y austral y las aves marinas de estos ecosistemas
El CBA ha sido un catalizador para el desarrollo científico de jóvenes investigadores, generando oportunidades para que nuevos profesionales se formen en el área de la biología de la conservación. Con un fuerte arraigo en Valdivia, el Centro Ballena Azul realiza investigaciones en los mares australes, en estrecha colaboración con la Facultad de Ciencias de la UACH y la organización internacional WWF, entre muchos otros actores de gran relevancia para la conservación marina.
Texto
Francisco Morey. Centro Ballena Azul
Nota Publicada Diario Austral de Los Ríos
http://edicionimpresa.soychile.cl/valdivia/?fp=20120124&pag=02
http://edicionimpresa.soychile.cl/valdivia/?fp=20120124&pag=03