Con el objetivo de formar guías que estén habilitados y habilitadas para ingresar a las Áreas Silvestres Protegidas (ASP) administradas por CONAF en la Región de Aysén, la Universidad Austral de Chile -en alianza con la Asociación de Guías de la Patagonia (AGAP) y el PER Turismo de CORFO Aysén- desarrolló un curso en el que 19 guías adoptaron nuevos y mejorados conocimientos que les permitirán entregar un buen servicio a los viajeros, acogidos al uso público de la áreas y los objetivos de creación de éstas.
La AGAP busca que los guías tengan conocimiento y propiedad sobre los sectores en que trabajan. Por eso surgió la idea de profesionalizar aún más a sus miembros y ser parte de la protección de las Áreas Silvestres Protegidas. Francisco Lara, presidente de la AGAP, destacó el trabajo realizado. “La idea surge luego de ver el trabajo que se desarrolla en el Parque Nacional Torres del Paine en la Región de Magallanes. De esta manera, definimos un curso de formación, con una malla tipo y acá la perfilamos para nuestra región, entre la UACh, CONAF, PER Turismo y nosotros, para la habilitación de guías en las Áreas Silvestres Protegidas. El primer curso se realizó en el 2020, se habilitaron 34 guías. En esta segunda entrega fueron 19. Lo que buscamos como Asociación es que más guías se certifiquen, para que todos los guías tengamos un mismo relato e ir profesionalizando el guiado, ofreciendo un mejor servicio a quienes visitan la región y motivar la contratación de guías locales certificados para entrar a las ASP, con curso de primeros auxilios y registro en SERNATUR al día, y que forme parte de una asociación gremial o agrupación de guías de la región”.
Programa de formación
Parte del programa de formación incorporó la definición de los tipos de turismo que se desarrollan en Aysén y el desafío de avanzar hacia un turismo sustentable a nivel local y regional. Asimismo, se abordó la normativa vigente respecto a las ASP, en particular lo relativo a la recreación y turismo, y los aspectos logísticos y de planificación que deben realizar los guías para una operación oportuna. También se trabajó en torno a la puesta en valor de los principales objetos de conservación de la geo y biodiversidad, con foco en el rol del visitante y su aporte al cuidado de la naturaleza.
Desde el punto de vista patrimonial, se entregaron herramientas para poner en valor y conservar la identidad local, a través de la identificación y conocimiento de los principales hitos históricos regionales, así como las etnias y aspectos culturales.
Finalmente, quienes participaron pudieron trabajar en dos talleres prácticos: uno en torno a las habilidades blandas y comunicación efectiva como eje de la vinculación entre el relato turístico y sus visitantes, y el segundo sobre los principios y aplicaciones prácticas de No Deje Rastro”.
Las actividades se desarrollaron a lo largo de cuatro semanas y fueron ejecutadas en distintos espacios de formación como la Reserva Coyhaique, el Museo Regional de Aysén y el Campus Patagonia de la Universidad Austral de Chile.