La enfermedad de la congestión vehicular se ha instalado en la cotidianeidad del Campus Teja de la Universidad Austral de Chile, duplicando los vehículos motorizados privados en los estacionamientos habilitados. Esto se correlaciona con el fenómeno a nivel valdiviano, pues ha habido entre el 2002 y el 2013 un aumento del uso del auto de un 23 a un 40%. La bicicleta en tanto eleva un punto, la caminata baja de un 33 a un 23% y el transporte público desde un 38 a un 29%.
Esta tendencia es efecto del desarrollo urbano chileno del siglo XX, determinado por la expansión de la industria automotriz y su influencia en la transformación urbana, con factores comunes en la configuración del problema, pero con dos modos divergentes en la búsqueda de soluciones.
En el primer abordaje, desde el marco de pensamiento generador del problema, ante el déficit de espacio para circular o estacionar se responde ampliándolo, lo cual se conoce como gestión de la oferta, que es sólo un tratamiento cortoplacista a los síntomas de la enfermedad. El segundo, ante un déficit de espacio para los autos, se reduce la presión que sus usuarios ejercen sobre el espacio público, lo que se conoce como gestión de la demanda y significa una cura real al tratar la enfermedad urbana en su causa. Esto guarda evidentes coincidencias con los modos posibles de pensar y actuar ante el dilema e impacto del modelo del crecimiento infinito en un mundo finito.
En la UACh el enfoque al problema era desde la gestión de la oferta, pero dos sucesos han modificado el curso de acción hacia lademanda: 1) la congestión en sus campus y su entorno se acerca al nivel de crisis, y 2) la firma del Acuerdo de Producción Limpia el 2013, que evidenció que el uso del auto además impacta negativamente por su aporte a la Huella de Carbono institucional.
Lo descrito es coherente con cambios positivos a nivel comunal, regional, nacional o global, pero en paralelo operan aún acciones dañinas propias del pensamiento que está en retirada. Estamos en una época transicional de cómo se proyectan y transforman ciudades e instituciones.
En esta línea, convocamos a sumarse al cambio por el buen vivir y a re-pensar la ciudad pedaleando este viernes 30 a las 10.00 hrs., en la Cicletada «Valdivia ciudad pedaleable».
LEER COLUMNA EN EL DIARIO AUSTRAL REGIÓN DE LOS RÍOS