La Escuela de Derecho de la Universidad Austral de Chile se sumó a la convocatoria de la sexta versión del Programa de Pasantías no remuneradas de la Dirección de Estudio, Análisis y Evaluación de la Corte Suprema de Justicia, a través del alumno egresado Daniel Castro González.
Esta pasantía se realizó durante 5 semanas durante noviembre y diciembre, contemplando visitas a tribunales penales, laborales, cortes de apelaciones y Corte Suprema.
Para apoyar esta iniciativa, la Escuela de Derecho abrió un concurso de una plaza para estudiantes de quinto año y egresados, otorgando un aporte económico destinado a financiar los gastos de traslado y mantención. Daniel Castro resultó ser el ganador de este concurso poco antes de rendir su examen de grado.
En este contexto, en que el escenario profesional crecientemente competitivo exige que el estudiante se familiarice al con sus prácticas y sus códigos como un aspecto diferenciador, la malla curricular de la carrera contempla el fortalecimiento de una vinculación temprana con el medio profesional. Por ello se incorporó de manera obligatoria la asignatura de Pasantía Profesional, que permite al estudiante integrarse en alguna institución pública o privada en convenio con la Facultad para desarrollar los conocimientos y destrezas adquiridas.
Pasante
Daniel Castro González inició esta pasantía en el mes de noviembre y hace un par de semanas además rindió su examen de grado obteniendo así su Licenciatura en Ciencias Jurídicas y Sociales. Además, en su ceremonia de egreso el año 2013 obtuvo el Premio Valentín Letelier, a la excelencia en Derecho Público.
– ¿Qué esperas de esta pasantía? ¿Cuáles son tus expectativas?
“Veo en esta pasantía un buen tránsito de ser estudiante a abogado. Las expectativas que se tienen de hacer una pasantía en la Corte Suprema son altísimas, sobre todo respecto de aprender cuestiones jurídicas prácticas que no siempre son enseñadas en las salas de clases. De igual manera considero interesante interactuar y compartir experiencias con pasantes de derecho de otras universidades”.
– ¿Qué opinas ahora del programa de Pasantías de la Escuela de Derecho UACh?
“Como estudiante se agradece la ampliación de la gama de instituciones en las que se puede hacer una pasantía profesional en quinto año de la carrera. En dicha ocasión estuve como pasante en la Dirección Regional del Sernam y en el Centro de la Mujer. Considero sumamente interesante el tener acercamientos con distintas labores en que se pueden desempeñar los abogados. En mi experiencia, por ejemplo, las tareas que tuve que desempeñar en el Sernam fueron totalmente distintas a las que estoy realizando en la Corte Suprema y sin duda serán también distintas a las que tendré que realizar en la práctica profesional, por lo que considero que mi visión respecto de las diferentes áreas de desempeño de un abogado es ahora mucho más amplia gracias a las pasantías y por lo mismo, me siento mejor preparado para enfrentarme a ellas”.
– ¿Cómo has sentido la presión del medio laboral respecto de la formación recibida en la UACh?
“Me he sentido preparado para los desafíos que dicen relación con cuestiones jurídicas, considero que la formación que recibí en la Escuela de Derecho de la Austral fue muy buena. Me sentía bastante seguro respecto de los conocimientos teóricos; desde luego que en las cuestiones más prácticas existían ciertas dudas, pero se han ido disipando con el correr de las semanas”.
– ¿En qué labores jurídicas te ha correspondido intervenir durante esta pasantía?
“Al comenzar el programa me encomendaron realizar un informe sobre dos proyectos de ley que pretenden sustituir la actual ley N° 18.314 (‘ley antiterrorista’). El trabajo fue interesante puesto que consistía en analizar los proyectos, señalando sus falencias y virtudes de la forma más descriptiva posible, con el objeto de guardar la debida imparcialidad, lo cual fue un desafío porque es algo que nunca había hecho antes. Además, he asistido a audiencias en la Corte Suprema, Corte de Apelaciones de Santiago y Centro de Justicia y hemos visitado el Centro de Medidas Cautelares en materia de familia. En general ha sido una experiencia muy gratificantes, cansadora también a ratos pero muy enriquecedora”.