No. No es que en Chile no tengamos miedo o estrés durante los sismos. Sucede que posterior a un ejercicio constante y sistemático de educación civil, gran parte de la población chilena sabe cómo y cuándo actuar según las características de un terremoto. Tenemos en casi todos los lugares públicos zonas seguras con señaléticas, vías de escape, protocolos establecidos en los colegios y, por lo demás, reiteradamente ensayado. Eso es muestra de un compromiso institucional y cultural de concientización frente a un fenómeno natural que, de cuando en cuando, sacude el territorio.
Y es precisamente esto lo que marca la diferencia frente a una crisis. Cuando no sabemos cómo afrontar una situación crítica, es fácil que a las sensaciones de miedo le siga una experiencia profunda de incertidumbre, produciendo una experiencia de pánico que poco colabora al manejo. Con todas estas emociones en el cuerpo y sin las competencias mínimas para abordarlo tendemos a tomar decisiones erradas, que pueden tomar un carácter impulsivo o en otro polo, un bloqueo inhabilitante. En cualquier caso, aumentamos el riesgo y podemos agravar las consecuencias.
Si en Chile tuviéramos en salud mental un equivalente a operación Deysi, quizá no nos ahorraríamos la proliferación (que ya tenemos) de síntomas de ansiedad y depresión, pero de seguro tendríamos un mejor manejo de afrontamiento respecto a crisis psicológicas. En nuestro país, fallecen más personas por suicidio que por terremotos, tenemos más familias damnificadas por la violencia de género que por maremotos, no obstante, no parece ser suficiente para concientizar y hacernos responsables de una crisis que, previo a la pandemia, ya venía en una oleada crítica.
Espero algún día tengamos las competencias para abordar el sismo de la salud mental, ese que remece silencioso y que en escala de Mercalli a veces termina en grado 12, vale decir, en una lamentable destrucción total y en otras, la mayoría de las veces oscila entre un grado 6 u 8. Todos lo sentimos y los daños estructurales son considerables.