Basada en LONGISLAND (secret love-2010) de Juan Claudio Burgos, la obra es una interpretación del autor de la compilación epistolar Niña Errante: Cartas a Doris Dana (2009). El montaje está financiado por el Fondart Regional de Los Ríos, convocatoria 2015, del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes.
La dramaturgia de “Cartas” estuvo a cargo de Amalia Ortiz de Zárate y Roberto Matamala, quien también la dirige. La obra es protagonizada por Amalia Ortiz de Zárate. La escenografía está a cargo de Aldo Aguilar, la iluminación de Francisco Ríos y la asistente de dirección es Nicol Guarda.
Juan Claudio Burgos participó en el IV Congreso Nacional de Dramaturgia que se realizó en la UACh el 2010. El año anterior Pedro Pablo Zegers había publicado Niña errante. Cartas a Doris Dana.
Impresionados por la profundidad de esa correspondencia epistolar acordamos con el dramaturgo que hiciera una versión que pudiese ser llevada a escena. Efectivamente, un par de meses después nos envía un texto que titula Longisland. Sin embargo, los años pasaron y recién el 2014, Amalia Ortiz de Zárate conoce el texto dramático de Burgos y, habiendo leído anteriormente el libro en el que se basaba y habiendo investigado la representación del cuerpo en la poesía de la Premio Nobel, se entusiasma para ponerlo en escena.
“Nuestra idea fue huir del morbo a toda costa. Sacamos cualquier alusión a un nombre propio. Si bien cada una de las palabras del texto pertenece a Mistral, nuestra Cartas son la puesta en escena de la comunicación erótica de dos seres humanos. Dos personas llenas de misterios como cualquiera de nosotros. Queremos mostrar la compleja representación de Eros que parece llenarlo todo, pero que, sin embargo, siente las punzadas violentas de Tanatos, que se sabe, más temprano o más tarde, vencedor: ‘Están cavando el pozo en Miradores’, ‘Continúan cavando el pozo’, como metáfora del cáncer inmisericorde”, señala el director, Roberto Matamala.
La actriz y dramaturga, Amalia Ortiz de Zárate, agrega: “Hicimos estas cartas de amor para mostrar lo profundo, lo alegre, lo luminoso, lo triste, lo cambiante que puede llegar a ser el amor. Y que esa profundidad, esa alegría, esa luz, esa tristeza, esos cambios, se llenan de belleza cuando son develados por la verdad humana hecha palabras”.