Con las palabras de bienvenida de la Seremi de Medio Ambiente Paola Bäuerle y una charla magistral sobre la microalga invasora didymo dictada por el científico del Centro de Investigación en Ecosistemas de la Patagonia (CIEP) Rodrigo Merino, se dio inicio a la actividad Senderos del Agua del Programa Copas Sur Austral de la Universidad de Concepción, que reunió este viernes a estudiantes de quinto a segundo medio de cinco establecimientos educacionales de Coyhaique.
“La actividad de hoy que por vez primera se realiza en la región de Aysén, es el mejor ejemplo que la educación ambiental fuera de la sala de clases, es la mejor herramienta para trasmitir a la sociedad nuevos conceptos y sensibilizar en temas como la calidad de las aguas en la Patagonia, mediante observación de invertebrados acuáticos, en ambientes de lagunas, lagos y ríos. Será un aprendizaje que no olvidaran los científicos del futuro”, señaló Bäuerle.
Esta iniciativa juntó a estudiantes del liceo Altos del Mackay; escuela Agrícola de la Patagonia; liceo Josefina Aguirre y los colegios Bautista Chaddai y El Camino; donde los jóvenes monitorearon la calidad del agua de los lagos Elizalde y Paloma, río El Blanco y las cascadas del salto y del río Cea.
Luís Pinto, coordinador de la actividad indicó que uno de los objetivos de esta iniciativa Senderos del Agua era hacer un evento interinstitucional con varios actores importantes de la región involucrados con la investigación y con los recursos naturales, en este caso concreto del agua.
“La idea del sendero del agua es que a través de actividades concretas de medición de la calidad del agua, los estudiantes, profesores y nosotros mismos podamos ver y medir si el agua que nos rodea está o no contaminada, es una forma de desarrollar competencias, habilidades y destrezas, hacer mediciones entendiendo lo que hacen los investigadores, las dificultades y además de eso juntarnos con docentes que están interesados en mantener esta posibilidad de trabajo, el próximo año, usando un kit muy sencillo que hemos usado con escuelas de distintas partes del planeta”, destacó Pinto.
Acciones y percepciones
Entre las actividades que se desarrollaron en esta jornada educativa, los estudiantes juntos a sus profesores hicieron mediciones de acidez, cantidad de oxígeno, turbidez (claridad de agua), temperatura y cantidad de sales disueltas, en los sitios de estudios. También Luís Uribe, tesista del CIEP, aprovechó la instancia y enseñó en terreno las características de la microalga invasiva didymo, sus formas de dispersión e invertebrados que habitan el agua que se asocian con esta especie introducida.
Pablo Bulnes, profesor de ciencia del colegio Bautista Chaddai, destacó la importancia de esta actividad para los alumnos. “Es muy buena para los estudiantes sobre todo de colegios que no tienen accesos a laboratorios o a técnicas tan sofisticadas para el análisis de agua, que conocieron la realidad de lo que es el didymo y la problemática que esta ocasiona, porque hay alumnos que no conocían esta microalga, ahora tienen una experiencia más cercana y esto también puede replicarse en las escuelas o en el entorno en el que ellos viven”.
Por su parte, la estudiante de quinto año A del colegio el Camino, Angelina Mansilla, quien fue parte de este grupo contó su experiencia. “Me gustó porque fue súper divertida y un poquito mágico para mí, sobre todo cuando le colocábamos agua al instrumento y luego le poníamos dos pastillas y cambiaba de color. Aprendí a medir la calidad del agua y que hay un alga maligna que se come todos los nutrientes del agua que se llama didymo. Es buena esta actividad porque podemos explorar un poco y aprendemos más de nuestra región”, explicó.
Para concluir, es importante mencionar que esta actividad fue organizada por el Programa Copas Sur Austral, el CIEP y el Ministerio del medio Ambiente, y contó con el apoyo del Programa EXPLORA de Conicyt.