<p align="justify"><em>* El viernes 09 de enero finalizaron los talleres "Valdivia Arqueológica II" y "Escuela de fantasía…" en el Museo Histórico y Antropológico Mauricio Van de Maele. </em></p><p align="justify">Emocionado estaba <strong>José Barrientos Vásquez (77 años), uno de los trabajadores de la ex Cervecería Anwandter</strong>. No había entrado a la ex cervecería -sobre cuyas ruinas funciona el Museo de Arte Contemporáneo de la UACh- desde que dejó de trabajar en ella, en el año 1960. </p><p align="justify">"Da tristeza ver lo que antiguamente era cervecería… Pero se ganó algo más porque ahora esto está todo lindo, bonito", asegura el ex trabajador, quien la mañana del jueves 08 de enero fue invitado a contar su experiencia a los 19 niños provenientes de diversos lugares de Valdivia que participaron en el <strong>taller "Valdivia Arqueológica II". </strong></p><p align="justify">Esta iniciativa se enmarcó dentro de la actividad "Vacaciones en los museos: Talleres para niños", organizada por la Dirección Museológica de la <a href="http://www.uach.cl/">Universidad Austral de Chile</a>. Además, este mismo día se dio inicio simbólico a las actividades de campo del proyecto FNDR "Valdivia Arqueológica. Guía Histórica de la Ciudad", dirigido por el arqueólogo Simón Urbina. </p><p align="justify"><strong>Recuerdos de la Cervecería</strong> </p><p align="justify">Según indica la página web del MAC Valdivia, el gigantesco incendio de 1912 destruyó gran parte de la cervecería Anwandter, por lo cual fue vendida a la CCU en 1916. Siguió en funcionamiento hasta mayo de 1960, año en que el terremoto destruyó gran parte de su infraestructura. Este hecho, sumado a la aguda depresión en que cayó la ciudad de Valdivia, obligó a la CCU a cerrar la industria, orgullo en esos tiempos para la zona y el país. </p><p align="justify">Dos años más tarde los terrenos de la cervecería fueron donados por la empresa a la Universidad Austral de Chile. Actualmente, en sus alrededores se ha configurado el Campus Cultural de la UACh, donde se ubican el MAC, la Costanera Cultural, el Museo R.A. Philippi, el Museo Histórico y Antropológico Mauricio Van de Maele y la Escuela de Artes Visuales. </p><p align="justify">Testigo de esta historia, José Barrientos recuerda que en la época en que trabajó, la cervecería "tenía harto movimiento porque la industria se componía de 300 personas más o menos. La mercadería para fabricar cerveza la traían desde la estación de ferrocarriles y a través de lanchones ésta llegaba a la industria". </p><p align="justify">Explica que trabajaban "de ocho a un cuarto para las doce y de las dos hasta un cuarto para las seis, de lunes a viernes. Se fabricaba malta y pilsener, y diariamente salían 3.000 a 5.000 cajas de cerveza".</p><p align="justify">Nacido y criado en Valdivia, Barrientos se desempeñó en el área donde se embotellaban las cervezas. Pero primero trabajó en la fábrica de calzado Rudloff, otra de las industrias creadas por los colonos alemanes en Isla Teja. "Me cambié porque quería conocer los rubros de otras industrias", sostiene.</p><p align="justify"><strong>Arqueología Urbana</strong> </p><p align="justify">El investigador responsable del proyecto FNDR "Valdivia arqueológica…", Simón Urbina, indica que en esta segunda versión del taller "quisimos establecer un diálogo directo entre los niños de Valdivia que agrupa el taller y el proyecto de investigación que busca crear una guía histórica de Valdivia. De esta forma se da cumplimiento a uno de los objetivos de este estudio, acercando el conocimiento científico y su práctica a la ciudadanía". </p><p align="justify">En ese marco, el jueves 08 de enero y junto con la supervisión de los arqueólogos les pasaron bolsas y etiquetas a los niños que participaban del taller para que hicieran en conjunto la primera recolección de materiales arqueológicos en un pequeño sector de la antigua cervecería, hoy Campus Cultural de la Universidad Austral. La actividad fue todo un éxito, ya que se pudo recuperar una diversidad significativa de cerámica, loza, cerámica vidriada, ladrillos, ampolletas, botellas, metales, textiles, maderas y carbón en superficie, todo lo cual será analizado luego en laboratorio.</p><p align="justify">"Si consideramos los documentos coloniales y posteriores estudiados por el Padre Guarda, esta cervecería es un punto central en la investigación porque justamente aquí -en la Isla Teja- también estuvo la fábrica de tejas de Valenzuela en la Colonia, el convento Jesuita, luego la fábricas reales de Garland en el siglo XVIII y probablemente uno de los asentamientos indígenas prehispánicos más importantes de la zona", asegura. </p><p align="justify">Por su parte, la Directora de la Dirección Museológica, Leonor Adán, destaca que este taller con niños se vincula de forma significativa a este proyecto FNDR que están realizando en conjunto con la agrupación cultural Biblioteja, cuya presidenta es Marcia Egert, antropóloga egresada de la UACh. Lo que busca este proyecto -cuenta- es impulsar un área de arqueología urbana y pública, donde se integra la participación de los vecinos.<br /> <br />"El trabajo con los niños es una aspiración de la Dirección Museológica, que trata de generar una comunidad educada patrimonialmente. Estos niños que hoy tienen 06 y 07 años, cuando tengan 12 poseerán una visión de ciudad que les cambiará la vida, al saber que están parados en un lugar con 10.000 años de historia", finaliza. </p>