Tranquilo, cálido y sereno, sentado entre su escritorio y piano, se encontraba Felipe Pinto d’Aguiar, compositor, actualmente Director de la nueva Escuela de Artes Musicales y Sonoras de la Universidad Austral de Chile (UACh). Ha viajado por el mundo, estudiando y componiendo distintas piezas musicales que han sido interpretadas en diversos países, donde ha encontrado la inspiración para darle vida a distintos instrumentos, dejando así su huella en lugares que jamás olvidará.
Su retorno a Chile y su lazo con la Orquesta de Cámara de Valdivia (OCV)
Después de su paso por Boston, lugar donde estudió un Doctorado en Composición bajo la supervisión de Joshua Fineberg, le comentaron que en el sur de Chile se estaba pensando realizar una nueva carrera de Artes Musicales y Sonoras, noticia que le causó extrañeza en un principio, pero una vez que verificó tal información, no dudó en postular para el cargo que ejerce actualmente.
“Había escuchado de la Orquesta, sabía que era una buena orquesta y de su formato bien especial, es decir, de su doble quinteto como base, de su buen nivel, y cuando llegué a Valdivia, por mi trabajo en la Universidad, comencé a ir a los conciertos y lo comprobé rápidamente”. Felipe, de nacionalidad chilena, realizó sus primeros estudios en Santiago, antes de emprender el rumbo a otros destinos, por lo que el vínculo con el país es muy importante para él.
Vínculo con la OCV y la creación de Gylos
Una vez que nació la idea en Felipe, se contactó con el Director Musical de la Orquesta de Cámara de Valdivia, Emmanuele Baldini, y con Cristóbal Urrutia, quien en esa época (2018) era el Director Ejecutivo del elenco. A continuación nos cuenta qué pasó luego de ese encuentro:
“Me motivé mucho en escribir algo para ellos (la OCV) y postulé a un Fondo de la Música para escribir una obra, así que sin duda esta pieza es para la Orquesta de Cámara de Valdivia. Es una composición para doble quinteto, es decir, para los cinco instrumentos de viento y los otros cinco instrumentos de cuerdas; desde luego, la pieza se puede adaptar para que la toquen orquestas más grandes también, pero está pensada muy camarísticamente, ya que es una escritura de líneas de 10 solistas”. La pieza musical a la cual se refiere Felipe tendrá su estreno mundial los días viernes 18 y sábado 19 de octubre, en el séptimo Programa de Orquesta de la OCV.
Origen de Gylos y su particularidad
En septiembre de este año concluyó Γύλος (Gylos), en la cual estuvo trabajando durante seis meses, de forma pausada y espaciada. Ciertamente, es el singular nombre de la obra lo que nos lleva a conversar de dónde nació tal idea y composición:
“Es el nombre común de un tipo de pez que habita en el Mediterráneo, lo conocí el año pasado cuando estuve en un Festival de música contemporánea en Mykonos, en Grecia, en el cual también se estrenó una obra de cámara que escribí. En una mañana libre fui a bucear, aproveché el mar Mediterráneo y me encontré con este pez muy particular, me llamó mucho la atención por sus colores y por el movimiento, por esta característica iridiscente que tiene”.
Analogía del pez con la pieza musical
“Al ser un pez rápido, yo quería escribir una pieza que tuviera cierta rapidez ya que, en general, lo que escribo es más pausado, con ritmos armónicos más lentos, y ahora quería hacer algo distinto, poder representar esta cosa un poco vertiginosa y colorida del pez. Entonces, toda la pieza trabaja con armonías que son bien colorísticas, es decir, bastante vibrantes, a través de varias superposiciones de colores distintos, por ejemplo, cuando tú mezclas amarillo con azul y te aparece el verde, lo mismo pasa con los acordes, así van manifestando cruces y armonías intermedias. En estos cruces, aparecen colores nuevos, con los cuales traté de aproximarme al color del pez, pero llevado al sonido”.
El compositor de Gylos comenta que, si bien la escritura es bastante convencional, el resultado final no tanto: Se mantiene la idea de preservar una práctica estándar de la escritura orquestal y del instrumento de manera idiomática, pero buscando sonidos nuevos.
Finalizando la grata conversación, un expectante Pinto d’Aguiar expresa que le encantaría seguir compartiendo y componiendo para la Orquesta de Cámara de Valdivia, y comenta que “es un honor telonear a Wagner y Schumann” en el próximo Programa de Orquesta de la OCV, que se realizará los días viernes 18 de octubre en el Teatro Cervantes, y sábado 19 en el Aula Magna de la UACh, ambos conciertos a las 20:00 hrs. (entradas disponibles en www.eventrid.cl/ocv).