Señor Director:
Haciendo eco a múltiples estudios y acogiendo contundentes señales que ha entregado el Gobierno, destacamos la importancia que ha adquirido la investigación en su más amplio sentido, tanto en el desarrollo económico del país, como para cada uno de los chilenos. Hoy existe consenso sobre este punto entre los diferentes actores vinculados a la ciencia, tecnología, innovación, emprendimiento y creación artística, por lo que resulta pertinente e indispensable impulsar con fuerza la discusión sobre el presupuesto que destina el Estado para realizar dicha tarea; que −con una inversión del 0.38% del PIB− no es coherente con la relevancia declarada por las autoridades gubernamentales, siendo claramente insuficiente.
Considerando que gran parte de los fondos para esta materia provienen del Ministerio de Educación, nos preocupa la casi nula atención que se otorga a la investigación en el proyecto de la Reforma de la Educación Superior que se discute en el Parlamento; no obstante la trascendencia que esta actividad tiene en la educación terciaria y como motor del desarrollo sustentable en la sociedad moderna.
Otra fuente importante de inversión en esta área proviene de las agencias gubernamentales destinadas a este fin. Es importante relevar que en los últimos años ha aumentado el número de proyectos de calidad internacional que son evaluados en los organismos pertinentes del Estado, pero que no consiguen el anhelado financiamiento. Lamentablemente, esto genera un profundo, permanente y preocupante sentimiento de frustración en las nuevas generaciones de científicos nacionales; dilapidando así un capital humano avanzado crítico, que ansía contribuir al sueño compartido del desarrollo de Chile.
Ad portas de la discusión del Presupuesto de la Nación para 2017, queremos hacer un llamado a la Presidenta de la República y a toda la clase política a asumir con determinación la necesidad de “repensar” el financiamiento para la investigación en el país, con una visión de urgencia y futuro. De no mediar un cambio en esta visión, seremos meros espectadores del progreso en el resto del mundo y con impotencia veremos cómo se crea conocimiento e impacto en otros países. Para transitar de una frágil economía basada en materias primas a una economía sustentada en el conocimiento, se requiere un fomento real a la investigación. Es ahora el momento de dejar una huella en la historia, declarando un compromiso de acciones concretas en el presupuesto nacional.
Joel Saavedra, Ma. Elena Boisier, Carlos González, Hans Richter, Ma. Cecilia Hernández, Nicolás Schiappacasse, Mónica Tapia, Mariella Gutiérrez, Patricio Haberle, y Ma. Teresa Muñoz.
Comisión de Ciencia, Investigación e Innovación de Red G9