En el Foro “Buenas prácticas en reciclaje en establecimientos educacionales”, realizado el Día Mundial del Reciclaje, se presentó la experiencia de una brigada ecológica escolar; la forma cómo el Departamento de Educación Municipal (DAEM) incentiva a los colegios a implementar un programa ambiental y un proyecto que busca sensibilizar comunidades escolares en temáticas que complementan ciencia y reciclaje.
Junto a su alumno y monitor, Lorenzo Gacitúa M., la profesora María Francisca San Martín H., expuso el tema «Cómo formar tu Club de Forjadores Ambientales: implementando eco brigadas en colegios de Valdivia», desde la experiencia de dirigir una en el Instituto Inmaculada Concepción. Como primera recomendación señaló, “un profesor que se haga cargo de una brigada ambiental debe sentir mucha pasión por el cuidado del planeta, debe ser una motivación profunda. Cualquier docente puede hacerse cargo mientras tenga las ganas, la energía y el amor por la naturaleza”.
Para ella esta forma de relacionarse con el tema es la que permite transmitir a sus alumnos esa pasión, motivarlos y darles ideas. “El docente debe ser estratégico, «movido», hacer muchas gestiones, tener contactos y redes, ojalá pertenecer a redes ambientales de la ciudad, estar informado sobre las iniciativas que se están implementando en lo local como en lo nacional”, precisó.
Por su parte la bióloga Carolina Jara V., Coordinadora de Educación Ambiental en el DAEM en Valdivia se refirió a cómo se promueve e incentiva este tema en comunidades educativas municipales, a través del Sistema de Certificación Ambiental Municipal y abordando los ámbitos curricular-pedagógico, de gestión ambiental y de relación con el entorno. Informó que de 42 establecimientos educacionales en la comuna, 16 están certificados en diferentes niveles (excelencia, medio y básico).
Entre los aspectos que se abordan a nivel de gestión ambiental en los colegios que participan de este proceso, figuran buenas prácticas en el manejo de residuos contemplando reciclaje de papel y aceite, además de acopio de pilas. También actividades asociadas a implementar huertos escolares y hermosear el entorno; acciones de eficiencia energética e hídrica, entre otras.
Mientras que el ingeniero agrónomo Benjamín Díaz H., voluntario y emprendedor de la Cooperativa de Reciclaje Valdivianos Sin Basura, contó la experiencia de los Talleres de Educación Ambiental “La Ciencia del Reciclaje” que han realizado en colegios de la Región de los Ríos bajo el alero del proyecto Cultura Científica, de Tecnología y de Innovación (CTI) de la UACh.
Éstos apuntan a educar y sensibilizar a la comunidad escolar en torno a los problemas que generan los residuos y las oportunidades de manejarlos mediante prácticas de reducción, reutilización y reciclaje, valorizando los materiales que pueden ser considerados por la sociedad como basura.
Actividades que más disfrutan los (as) niños (as)
La docente del Instituto Inmaculada Concepción citó entre las actividades preferidas por los (as) niños(as) las salidas a terreno en las que ven in situ situaciones de buenas y malas prácticas ambientales. También operativos de limpieza; «reciclatones» cuando llevan todo el plástico y vidrio recolectados en el colegio a un punto limpio y las recolecciones de envoltorios por los basureros del colegio para hacer eco-ladrillos.
Es así como han visitado varios lugares asociados a la UACh como el Centro de Rehabilitación de Fauna Silvestre de la Facultad de Medicina Veterinaria, la Unidad de Manejo Integral de Residuos (MIR) en el Fundo Teja Norte y Radio UACh (programa Campus Sustentable). Además, desfiles de brigadas ecológicas en la plaza y recorridos por el centro entrevistando a la gente con preguntas tales como ¿Qué hace usted por el medio ambiente?