* Contundentes cifras y enriquecedoras vivencias personales marcaron el trabajo del Ballet Folklórico de la Universidad Austral de Chile en su extensa gira por el este de Europa.
Un total de 42 presentaciones y 7 desfiles que llegaron a un público aproximado de 20 mil personas, son los resultados en cifras del trabajo realizado por el Ballet Folklórico de la Universidad Austral en su gira realizada por Europa.
A esto se suman las fructíferas reuniones con autoridades culturales sostenidas por el Director del conjunto universitario, Julio Mariangel, quien en República Checa generó importantes contactos para futuras presentaciones del BAFUACh y de conjuntos latinoamericanos en países del este europeo. El profesor Mariangel arriba este fin de semana a Valdivia, dando con esto fin a la exitosa gira internacional del ballet universitario por el viejo continente.
No obstante, y más allá de las cifras, la experiencia vivida por los integrantes del BAFUACh durante más de un mes de enriquecedores intercambios culturales, les ha significado un aporte personal y también profesional en sus diversos ámbitos académicos.
Un ejemplo es el testimonio de Ángel Roa, monitor de danza del ballet, quien ha participado en múltiples giras del conjunto universitario: «Según mi apreciación, la gira cumplió a cabalidad con el objetivo de dar a conocer nuestra cultura y nuestras tradiciones a personas y pueblos que en muchos casos no nos conocían ni siquiera geográficamente. A pesar del idioma el intercambio de experiencias y cultura fue amplio, y esa barrera se pudo traspasar fácilmente por medio del lenguaje de la danza y la música. En el ámbito netamente artístico, siento que se cumplió el trabajo que se iba a mostrar, eso tomando en cuenta que los integrantes en su mayoría participaban por primera o segunda vez en eventos internacionales», comentó el monitor de danza del BAFUACh.
Experiencia Laboral
Ángel Roa realizó sus estudios de Ingeniería en Maderas en la Universidad Austral, institución en la cual actualmente se desempeña como profesional. Desde este punto de vista, también nos comentó parte de su experiencia en Polonia: «Es un país muy apegado a lo agrícola y forestal, aún que en este último sector es muy dependiente del clima, preferentemente en el invierno por los bajos crecimientos que se dan con la nieve. Pienso que acá somos privilegiados en ese sentido. Con respecto a las industrias de la madera, son relativamente pequeñas pero muy ordenadas y preocupadas del medio ambiente y su entorno. Además, es destacable la calidad de vida de sus trabajadores, que es lo que pude apreciar y corroborar por los antecedentes que había investigado antes del viaje», señaló.