Un importante hallazgo realizó el ingeniero en sonido Gabriel Andrés Morales Tello, recientemente graduado del programa de Magíster en Acústica y Vibraciones (MAV) de la Facultad de Ciencias de la Ingeniería de la Universidad Austral de Chile, mediante su trabajo de tesis «Método para el monitoreo bioacústico anual de aves en humedales urbanos usando red neuronal profunda».
La investigación arrojó como resultado el hallazgo de ejemplares de Porzana spiloptera, comúnmente conocido como burrito negruzco, especie muy poco conocida y cuya presencia no estaba registrada en el territorio de la Región de Los Ríos.
“En mi investigación de tesis trabajamos una herramienta para el reconocimiento de las especies de aves a través de sus sonidos por medio de una red neuronal, y para implementarla hubo que crear un conjunto de datos. En esa etapa de construcción de datos, utilizamos las grabaciones del proyecto Soundlapse que se realizaron durante un año en tres humedales de la ciudad: el humedal Angachilla, humedal Miraflores y Parque Urbano El Bosque”, detalló Gabriel Morales.
“Encontré muchos cantos de esta especie en las noches del verano y las tenía etiquetadas de acuerdo a la hora y el lugar, pero no sabía lo que era. De esta forma, me empecé a vincular con otros especialistas que no eran del área acústica y que formaban parte del Centro de Humedales y del Instituto de Ciencias Marinas, quienes me ayudaron a identificar estos sonidos”, añadió.
Como resultado de las escuchas se corroboró que la especie habita en sectores del humedal Miraflores. “Eso fue como el primer resultado preliminar importante. Luego vino todo el trabajo relacionado con la tecnología y la red neuronal, donde hicimos un entrenamiento de la red con los datos que teníamos almacenados para que ésta aprendiera a identificar por sí misma los datos,” precisó.
Una vez entrenada la red, se ingresaron los registros correspondientes a un año completo equivalentes a alrededor de 30 mil audios de cinco minutos cada uno, lo que sirvió de referencia para contar con la información total de las especies que hay en los tres humedales estudiados, y así identificar la actividad de cada una de ellas durante ese período y saber, por ejemplo, a qué hora está activa una especie o en qué estación particular del año.
“No sólo analizamos la actividad acústica, sino que pusimos otras variables también en sincronía, como la temperatura, las horas de sol, las precipitaciones o variables climatológicas, para ver si es que habían coincidencias o correlaciones con otro tipo de oscilaciones ambientales, y ahí surgieron algunas cosas interesantes como, por ejemplo, que algunas especies se correlacionan bien con el crepúsculo vespertino o que en el solsticio de invierno empieza a cantar la becacina en las noches, y así muchos datos bien interesantes”, destacó el graduado.
Aves
Morales, quien es originario de Antofagasta, cursó sus estudios de pregrado en Ingeniería en Sonido en la U. Tecnológica de Chile, en Santiago, dedicándose por años a trabajar en el área de postproducción en sonido para películas, cine y documental.
Actualmente reside en Valdivia, donde decidió cursar estudios de postgrado en el Magíster en Acústica y Vibraciones de la Universidad Austral de Chile.
“Mi trabajo anterior consistía en gran parte en la edición de sonidos ambientales donde hay que hacer todo un trabajo de ambientación y sonorización, ahí es donde entraron a jugar las aves, porque es un elemento muy rico técnicamente para embellecer las imágenes, las secuencias y todo tipo de trabajo audiovisual”, explicó.
El nuevo graduado del MAV sostuvo que, tras su ingreso al postgrado, tuvo la oportunidad de conocer nuevas tecnologías, compañeros, profesores y una red de trabajo en torno al machine learning e inteligencia artificial, ámbitos en los que -aseguró- no tenía ningún conocimiento previo, especialmente sobre programación o modelos de redes neuronales.
Respecto a las proyecciones y posibles aplicaciones de esta investigación, Morales señaló que su trabajo se puede plantear como un método para hacer seguimiento, tanto de las especies como de los humedales urbanos, aunque se puede extender y aplicar a cualquier ecosistema, ya que la red neuronal es bien robusta, permitiéndole ser más efectiva al momento de discriminar los ruidos de la ciudad.
“La aplicación que le veo es que con los datos que ya se tienen se puede generar una línea base como un primer análisis de este tipo en la ciudad y ojalá hacer nuevas campañas de medición cada dos o tres años para realizar comparaciones y ver si las especies están cantando más o menos y hacerse las preguntas correspondientes, de este modo hacer un seguimiento e identificar las posibles amenazas que puedan estar teniendo dichos ecosistemas”, mencionó.
Si bien aún no hay resultados concluyentes que apunten a evaluar el estado de conservación en el que se encuentran los humedales urbanos estudiados, sí se puede identificar a priori que “la cantidad de ruido de motores es de alto impacto a cualquier hora del día, si bien no podría decirte qué tipo de ave es más sensible que otra o cuál es la que está siendo más afectada por este ruido, ya que es necesario un estudio más profundo, uno intuye claramente que el ruido producido por los motores es de impacto y de cuidado, por lo que hay que tener mucho ojo con eso, porque debe haber especies que pueden estar sintiéndose desplazadas por ese ruido. Y no sólo aves, sino también anfibios, donde igual es clave la comunicación acústica”, aseguró.
Gabriel Andrés Morales Tello obtuvo una calificación de 7,0 en su examen de grado y una calificación final de 7,0, graduándose con Distinción Máxima. Actualmente, se encuentra trabajando en el proyecto SoundLapse intentando aplicar la red neuronal en una aplicación pedagógica que trabajará los paisajes sonoros de los humedales y preparando dos proyectos de divulgación de su tesis que se presentarán a los Fondos de Cultura, en las líneas de Registro Fonográfico y Nuevos Medios.
La comisión examinadora de la tesis de postgrado estuvo compuesta por el profesor patrocinante, Dr. Víctor Poblete Ramírez (Instituto de Acústica de la UACh); el Dr. Jorge Arenas (Instituto de Acústica UACh); y el Dr. Jorge Tomasevic (Centro de Humedales Río Cruces de la UACh) como informantes; el Dr. Heraldo Norambuena (Centro Bahía Lomas UST) como evaluador externo; y el Dr. Matthieu Vernier (Escuela de Graduados de la Facultad de Ciencias de la Ingeniería), como ministro de fe.