En el marco del estudio de impacto ambiental del proyecto de renovación de la infraestructura portuaria de caleta Chañaral de Aceituno en la Región de Atacama, el pasado 31 de julio el Dr. Alfio Yori, académico del Instituto de Acústica de la Universidad Austral de Chile, realizó mediciones de ruido submarino en la Reserva Marina Isla Chañaral, contratado por la consultora Control Acústico, a cargo del estudio.
La caleta Chañaral de Aceituno se encuentra en Freirina, comuna ubicada en la Región de Atacama, y frente a ella se ubica isla Chañaral, la cual forma parte de la Reserva Nacional Pingüino de Humboldt. «En torno a isla Chañaral se ubica la Reserva Marina Isla Chañaral, cuyas aguas son visitadas periódicamente por un gran número de cetáceos, dentro de los cuales se encuentran la ballena azul, jorobada, fin y varias especies de delfines”. La alta presencia de estos grandes cetáceos en esta reserva motivó la necesidad de mantener monitoreada esta zona con el fin de protegerla, señala el Dr. Yori.
Las principales especies que se pueden observar son el pingüino de Humboldt, el yunco, el chungungo, el lobo fino austral y el lobo marino común, y el estudio de línea base de ruido submarino se llevó a cabo con el objetivo de determinar los niveles de ruido a los cuales se exponen normalmente estos cetáceos en ausencia de fuentes antropogénicas en las cercanías.
“En la selección de los puntos donde se realizaron las mediciones, se consideró la información previa existente sobre los sectores de avistamiento de estos mamíferos marinos dentro y cerca de esta área marina protegida”, explica el académico.
El ruido de fondo submarino de un lugar cualquiera puede estar compuesto principalmente por ruido de superficie del mar, producido por el viento, olas y lluvia; ruido biológico, ruido sísmico-geoacústico y ruido de tráfico de embarcaciones.
“En este trabajo no se pretendía considerar toda la dinámica del ruido del sector, sino que sólo considerar la situación más desfavorable, es decir, el nivel de ruido ambiental de fondo más bajo existente en el lugar. Esto se logró midiendo sin la presencia de embarcaciones cercanas y sin ruido biológico o sísmico. El ruido presente medido fue solo el producido por las olas, el viento del lugar y embarcaciones turísticas menores lejanas”, afirma.
“Estas mediciones de líneas de base de ruido dentro y cerca de áreas marinas protegidas o cerca de puntos donde se congregan estos grandes mamíferos marinos, son muy importantes porque sólo así tendremos una base, a partir de la cual podremos determinar el impacto que futuros proyectos puedan producir sobre la fauna marina. De hecho, la zona en que se llevaron a cabo las mediciones posee gran presencia de fauna marina como ballenas, delfines, pingüinos, aves y peces, y en sus cercanías se pretende instalar el puerto del proyecto minero Dominga, lo que está generando preocupación en la comunidad”, concluye el investigador del Instituto de Acústica de la UACh.