El proyecto “Mejoramiento de la Unidad de Trasplante de Progenitores Hematopoyéticos del Hospital Base Valdivia” logró cumplir la meta de 10 trasplantes de médula ósea, a pesar de la contingencia provocada por el COVID-19. La iniciativa es ejecutada por la Universidad Austral de Chile y financiada por el Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC) del Gobierno Regional de Los Ríos y su Consejo Regional, con aportes de la UACh y el Hospital Base Valdivia. Busca ampliar y asegurar el acceso a trasplante de pacientes con cáncer hematológico, tanto autólogo como alogénico sin criopreservación, del sistema público de salud de la zona sur austral del país.
En 2018 el Hospital Base de Valdivia realizó 9 trasplantes autólogos en adultos. Durante 2019 se realizaron 19 procedimientos, y este año 7. El aumento fue gracias al proyecto FIC, pues el año pasado se habilitó la nueva sala de aislamiento Dr. Álvaro León, lo cual implicó que el centro asistencial regional se consolidó como el segundo recinto público de trasplantes de este tipo en el país.
La Directora del proyecto, la académica de la UACh Dra. Vivianne Torres, manifestó su satisfacción por el logro obtenido. “Estoy sumamente complacida, pues hemos completado la meta de este gran proyecto y a la vez, beneficiamos a muchos más pacientes de los contemplados. Ahora bien, estrictamente hablando, los pacientes que han ingresado a la sala Dr. Álvaro León y han podido ser trasplantados, gracias a lo que aprendió el Dr. Blaz Lesina y la Dra Susana Calderón en sus capacitaciones, son 10 pacientes”, indicó. En específico, detalló la Dra. Torres, el Dr. Lesina se capacitó en el Hospital Universitario La Fe de Valencia, España. En tanto, la Dra. Susana Calderón realizó su capacitación en la Unidad de Hematología Intensiva del Hospital del Salvador en Santiago.
“Es relevante destacar que los pacientes trasplantado son de las regiones de Los Ríos, O´Higgins, Maule, Araucanía y Magallanes. Todos ellos fueron muy bien atendidos, los pacientes agradecieron el compromiso del personal y la seguridad que en todo momento entregó el Hospital Base Valdivia. En definitiva, es un logro relevante para la salud pública del sur austral de Chile, gracias al aporte del Gobierno Regional que nos permitió ampliar la oferta de esta terapia costosa”, añadió.
Trasplante en tiempos de pandemia
Sin embargo, la crisis sanitaria del coronavirus provocó la paralización de los trasplantes por un mes y medio, lo cual hizo temer que no se pudiera cumplir la meta. “Fue una decisión difícil, pero discutida y tomada con seriedad, así como también lo fue retomar los procedimientos una vez que vimos que la incidencia de casos COVID-19 permitía realizarlos de forma segura en pacientes que tienen un riesgo muy alto de progresión en sus enfermedades”, relató la Dra. Susana Calderón.
El nuevo escenario implicó que se cumpliera un estricto protocolo de distanciamiento social y aislamiento, además de la preparación y acompañamiento de los pacientes que debieron mantenerse alejados de sus familias. “Hubo apoyo psicológico, social y un compromiso de atención, por ejemplo, en la toma de muestras. Se redoblaron los esfuerzos y se aplicaron nuevas estrategias, por parte del Banco de Sangre, para lograr donantes de componentes sanguíneos (plaquetas, glóbulos rojos)”, agregó.
La Dra. Calderón precisó que la tarea fue ardua y que tanto pacientes como familiares, al enterarse que podían acceder al procedimiento en el contexto de la pandemia, se mostraron confiados y tranquilos. “Tanto pacientes de nuestra región como de otras zonas del país no mostraron dudas o incertidumbre, sino más bien seguridad en acceder a un procedimiento complejo en un hospital público que ha cimentado su prestigio a través de años en el tratamiento de pacientes hemato-oncológicos”, aseguró.
En ese contexto, la Dra. Torres agregó que, gracias a otro avance del proyecto FIC, la implementación del software Core Hemato-Oncología y la receta electrónica de drogas de quimioterapia, tanto la farmacia como el médico tratante tuvieron una mejor entrega de información respecto a los tratamientos de cada paciente. “En el contexto de la pandemia nos sirvió bastante, pues disminuyó drásticamente el flujo de papel y por ende, el riesgo de contagio de COVID-19”, dijo.
Desde el Gobierno Regional de Los Ríos, el jefe de División de Fomento e Industria, Sr. Ernesto Espinoza Navarrete, señaló que “la salud y calidad de vida de las personas son ejes que promueven el desarrollo y la implementación de innovaciones, tecnologías y ciencia aplicada, que la Universidad Austral de Chile ha liderado en alianza con el Hospital Base de Valdivia a través de proyectos del Fondo de Innovación para la Competitividad (FIC), llegando a posicionar a nuestra región en un sitial de liderazgo y referencia a nivel país, en el desarrollo de técnicas y procedimientos clínicos complejos que hasta hace poco solo se podían realizar en Santiago. Por ello creemos que el esfuerzo tanto de la Dra. Vivianne Torres y todos los funcionarios del Hospital Base de Valdivia, merecen nuestro reconocimiento y felicitaciones por cada logro obtenido, ya que esto se traduce en que muchas familias ven la recuperación de la salud y calidad de vida de sus familiares o seres queridos en un momento tan complejo como el que vivimos actualmente fruto de la pandemia por COVID-19”.
Fortaleza
Por otra parte, la Dra. Calderón destacó la formación recibida por los docentes de la UACh, en conjunto con el hospital y la visión de las autoridades regionales que creyeron en el proyecto. “Quiero también destacar la madurez de un equipo que ha crecido con la incorporación de nuevos profesionales. Hemos tenido la fortaleza de tomarnos el tiempo necesario para sentar bases firmes, lo que a menudo es una espera más larga de la que quisiéramos”.
“Además, no puedo dejar de destacar la generosidad de los equipos que trabajan en Chile, en especial al del Hospital del Salvador, cuya labor de muchos años ha permitido que este tratamiento tan necesario pueda llegar a más pacientes. Es contribuir a un país con menos inequidad”, expresó.
Antecedentes
Es importante explicar que aún cuando el procedimiento se conoce coloquialmente como “trasplante de médula ósea”, lo correcto hoy en día es llamarlo trasplante de progenitores hematopoyéticos (TPH).
El “trasplante de médula ósea” se asocia a una punción ósea en el hueso iliaco, lo que se reserva actualmente para casos muy acotados. Actualmente, los progenitores hematopoyéticos se obtienen mayoritariamente desde la sangre periférica.
El TPH es un tratamiento efectivo en varias patologías hematológicas neoplásicas, como leucemia, linfoma, mielomas; y no neoplásicas, como anemia aplástica. La demanda de este procedimiento en el sur austral de Chile (Araucanía, Los Ríos, Los Lagos, Aysén y Magallanes) es de 48 trasplantes al año.
Hasta 2017 el único hospital público que realizaba este procedimiento era Hospital del Salvador en Santiago en dos modalidades, de acuerdo con el origen de las células hematopoyéticas:
° TPH Autólogo (THP auto), las células provienen del mismo paciente.
° TPH Alogénico (THP alo), las células provienen de un donante ajeno al paciente.
Dada la alta demanda, el Estado se ve obligado comprar servicios en el sector privado. El trasplante THP auto tiene un costo de $20 millones y el trasplante alo de $60 millones.