Existe un aumento en la demanda de alimentos a nivel mundial, y la producción de éstos no será suficiente para atender las necesidades de la población, que según la FAO se incrementará en cerca del 40% desde el año 2006 hasta el 2050.
Asimismo, se ha apreciado que la cosecha de cereales debería aumentar en un rango entre 1,16 y 1,31% anual para satisfacer la demanda, dependiendo del uso de estos cultivos para la producción de bio-comustibles.
Es en este contexto, que investigadores de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Austral de Chile(UACh), trabajan –entre otros ámbitos- en aumentar el rendimiento potencial del cultivo de trigo.
El Doctor Daniel Calderini, académico del Instituto de Producción y Sanidad Vegetal de la UACh y quien lidera la Red Metrice (Mejorar la Eficiencia en el Uso de Recursos y el Ajuste Fenológico en Cultivos de Trigo y Cebada) en Chile, indica que “se puede afirmar que el aumento poblacional y su consecuente incremento en la demanda de alimentos, constituye un desafío central para la agricultura del siglo XXI».
Lo anterior -sostiene- «en un escenario de cambio climático y bajo un paradigma de una agricultura sustentable económicamente y amigable con el ambiente”, afirma el Dr. Calderini
Agrega que para lograr el enorme desafío que plantea el aumento en la demanda de alimentos, existe consenso en que el incremento del rendimiento es la vía más efectiva para el aumento de la producción de los cultivos en general y de trigo en particular.
En este cultivo, “el incremento del rendimiento deberá lograrse, principalmente, a través, de una mayor producción de biomasa. Sin embargo, en algunos casos sería posible continuar aumentando el rendimiento mediante el incremento del índice de cosecha (la proporción de la biomasa aérea que se aloja en los granos). Esto último, fue la base de la revolución verde de los años 60”,expresa el académico.
Estrategias para incrementar el rendimiento
El grupo de investigación de la UACh, con el apoyo de proyectos FONDECYT y FONDEF, ha evaluado estrategias para incrementar el rendimiento potencial del cultivo de trigo.
“Los resultados obtenidos con líneas Doble Haploides son promisorios para incrementar significativamente el rendimiento en ambientes de alto potencial como los del sur de Chile, en especial, a través, del aumento de la biomasa del cultivo”, subraya el Prof. Calderini.
En síntesis, “es posible aumentar el rendimiento de los cultivares de trigo en el sur de nuestro país, a través, de la mejora genética mediante cruzamientos que optimicen el balance entre el número y el peso de granos”, expresa el académico.
En este contexto, informó el investigador, se han desarrollado 105 líneas Doble Haploides obtenidas con esta estrategia en colaboración con CIMMYT (Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo) y otras 225 líneas con INIA Carillanca, mostraron incrementos en la biomasa y el rendimiento de grano que superaron al mejor de los padres de las líneas doble haploides.
También superaron cultivares de trigo que se siembran en el sur de Chile. Los mayores rendimientos alcanzados – explicó Calderini- por algunas de las líneas estuvieron entre las 15 y 16 toneladas de peso seco de grano (http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0378429013000312).
En la actualidad, los investigadores del Instituto de Producción y Sanidad Vegetal de la UACh y de INIA Carillanca continúan con esta línea de investigación financiada por el proyecto FONDEF D09I1125.