El trabajo de restauración del borde costero en conjunto con los pescadores que busca repoblar de algas esta zona fue presentado por la académica de la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales de la UACh, Dra. Milen Duarte, en el I Simposio Internacional de Prácticas de Restauración Ecológica y III Encuentro Nacional de Restauración Ecológica de la Argentina. Junto a ella también participaron los integrantes del Laboratorio de Restauración Socioecológica Pablo Farías (colaborador) e Inao Vásquez (estudiante de doctorado).
La presentación se denominó “Co-producción de una solución basada en la naturaleza con restauración del intermareal chileno para el cambio climático”. En su charla, la Dra. Duarte explicó que este trabajo se gestó y se realiza en conjunto con sindicatos de pescadores interesados en repoblar el borde costero con algas.
“En Chile la extracción de algas se realiza principalmente desde bancos naturales, es decir, desde la misma roca o fondo marino. Prácticamente no existen cultivos de algas, en especial de las algas del intermareal. El extraerlas desde bancos naturales es algo insostenible, equivalente a cortar el bosque nativo para leña sin hacer un manejo adecuado”, comentó la experta en restauración.
Según la Dra. Duarte, existe mucho interés de los pescadores por repoblar el borde costero porque el alga tiene un valor en términos del mercado y es parte importante de su fuente de trabajo. “Pero además de este aspecto, es muy relevante que esta alga llamada huiro negro (del género Lessonia), es el hábitat de muchas otras especies de interés comercial, como por ejemplo el loco”, agregó.
Este trabajo corresponde a un proyecto del Fondo Packard (2021-73304) liderado por la Dra. Alejandra González de la Universidad de Chile, y co-dirigido por la Dr. Milen Duarte. Una iniciativa que se destaca también porque su grupo de investigación y trabajo está compuesto en un 60% por mujeres: investigadoras, asistentes, pescadoras y recolectoras de orilla.
“Junto a las y los pescadores, pensamos y ejecutamos acciones de repoblamiento con huiro negro, y adicionamos una parte científica importante porque hace algunos años con la Dra. González se descubrió que dentro de esta especie huiro negro existen individuos que son quiméricos, es decir, que tienen la capacidad de fusionarse con otros y generar un ‘súper individuo’ que nosotros denominamos ‘súper alga’. Estos se encuentran a lo largo de toda la costa chilena”, señaló.
La Dra. Duarte explicó que éstos poseen más de un individuo genético y esta unión se genera en la fase microscópica del alga, cuando es pequeña. Su importancia radica en que estos organismos multigenéticos son más resilientes al cambio climático, es decir, poseen mayor resistencia a cambios en la temperatura y mayor capacidad de captura de CO2. Por otra parte, crecen más rápido y son más robustos.
El equipo de trabajo creó una tecnología para generar individuos quiméricos en laboratorio y así aumentar la frecuencia de quimerismo de estas algas. “Es decir, existe una población de algas natural, y dentro de la misma población de algas se pueden encontrar individuos que son quiméricos y otros que son unigenéticos”, aclaró la profesora, destacando que la apuesta es llevar al borde costero aquellos individuos multigenéticos y el manejo de la técnica de repoblamiento se trabaja de la mano con los pescadores.
Si bien, en el Congreso se presentaron muchos trabajos de restauración desde la perspectiva socioecológica, éste en particular causó muy buena impresión entre los asistentes, y generó feedback y una reflexión sobre cómo se puede plantear este tipo de trabajo en Latinoamérica para generar un involucramiento real con las comunidades en procesos de restauración.
Cabe mencionar que desde el Laboratorio de Restauración Socioecológica participaron también Pablo Farías, con el tema “Esclerófilo vivo: uniendo comunidades y ciencia en la restauración con soluciones naturales” e Inao Vásquez, quien presentó “Restauración de humedales. El uso del ecosistema de referencia para definir indicadores y objetivos. El caso del río Maullín, Chile”.