Estudiantes de 4° a 6° año básico de la Escuela Rural San Antonio, ubicada en la comuna de Cochamó, Región de Los Lagos, participaron de talleres de robótica educativa durante agosto y septiembre.
Las y los estudiantes aprendieron sobre los robots, sus usos y componentes principales. También diseñaron y programaron un robot de tipo móvil capaz de arrastrar objetos una determinada distancia utilizando el kit Lego Wedo 2.0. A través del conocimiento y uso de la robótica, los estudiantes trabajaron contenidos curriculares de matemáticas y ciencias naturales de su nivel, explorando los efectos de la fuerza y el estudio de la medición de diversas magnitudes.
Esta actividad, que forma parte de un estudio piloto del proyecto Fondecyt de iniciación 11220143 “Explorando los efectos de un desarrollo profesional centrado en el diseño de unidades STEM que integran el proceso de diseño de ingeniería en contextos multigrado” -financiado por la Agencia Nacional de Investigación de Chile (ANID)-, buscó explorar los efectos de la educación STEM (ciencia, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés) en contextos multigrado.
Las sesiones de trabajo con los estudiantes fueron implementadas en co-docencia por el Dr. Jhonny Medina, Director del Instituto de Especialidades Pedagógicas de la Universidad Austral de Chile, Sede Puerto Montt, y la Dra. Ángela Castro, académica del mismo instituto e investigadora responsable del proyecto, y contaron con la colaboración para su diseño e implementación, del Dr. Cristhian Aguilera, académico de la Universidad de los Lagos, experto en área de robótica e inteligencia artificial.
Gisela Morales, profesora de la Escuela Rural San Antonio de Ralún, valoró estas actividades realizadas. «Estos talleres ofrecieron oportunidades de aprendizaje multidisciplinarios para los estudiantes. Se agrupó a toda el aula multigrado permitiendo entregar conocimientos nuevos a todos los estudiantes del aula y a la vez también esta metodología permite que los alumnos aprendan de forma autónoma y ellos se hagan parte de este aprendizaje».
La profesora destacó estos talleres de robótica y comentó que es una enseñanza que permite abrir otros aprendizajes en las y los estudiantes. “Es una forma de enseñarles también otro tipo de pensamiento en nuestros estudiantes, que los haga trabajar no tan sólo en las matemáticas y las ciencias, sino que también crea en el niño otra forma de pensar”.
En tanto, la investigadora responsable del proyecto, Dra. Angela Castro, valoró la realización de estos talleres. “Ha sido una experiencia muy positiva. Desde el ámbito investigativo, los resultados preliminares obtenidos en esta experiencia proporcionan orientaciones sobre cómo incorporar el conocimiento y uso de la robótica educativa para promover aprendizajes curriculares en varios niveles escolares a la vez, contribuyendo a la disminución de la brecha digital en la escuela rural. Así como también insumos para evaluar el impacto de este tipo de propuestas en contextos multigrado».
Finalmente, la académica agregó que “desde el trabajo con la comunidad, tanto el equipo directivo de la escuela como los estudiantes, valoraron positivamente la experiencia, manifestando su interés de seguir desarrollando actividades en esa línea, y agradecieron la oportunidad brindada por la Universidad de poder incorporar la robótica en el aula”.