Varios años de investigación han dedicado las científicas Dras. Carola Otth y Maritza Navarrete para el logro de procedimientos que permitan un diagnóstico oportuno del hantavirus y, con ello, la posibilidad de disminuir la letalidad del virus, tan presente en nuestro sur austral. Durante ese período, han desarrollado sendas investigaciones que, financiadas principalmente con recursos estatales, han permitido avances significativos como, por ejemplo, el equipamiento del laboratorio de referencia -uno de los 4 que existen en el país- o la producción en nuestra ciudad, y en grandes cantidades, del reactivo con el que se realiza el diagnóstico confirmatorio de la infección.
En la actualidad ambas investigadoras se encuentran abocadas al desarrollo de un kit rápido que permitirá el diagnóstico oportuno de la infección, iniciativa que se presentó ante la empresa coreana GenBody y que formará parte de un convenio que firmará con la corporación para la producción y posterior importación a nuestro país. La Dra. Otth destacó que esta colaboración ha sido concretada gracias a las gestiones del Dr. Alejandro Rojas, quien también forma parte del equipo de investigadores que ha trabajado en el proyecto.
“Para nosotros, este avance es altamente relevante porque como todos sabemos la infección por hantavirus es una zoonosis endémica en Chile, causada por el virus Andes, que se presenta por el contacto con el roedor colilargo, de allí que la preocupación por detectar su aparición en forma oportuna es un desafío”, señaló la Dra. Otth, quien estuvo en Corea y pudo conocer los laboratorios en los cuales desarrollan sus investigaciones y visualizar actividades de colaboración futuras.
La investigadora reconoció el interés del país asiático en la producción del kit, destacando que GenBody cuenta con experiencia en el diseño de diversos kits, como el desarrollado en alianza con laboratorios brasileños para virus Zika y dengue.
Investigaciones con recursos FIC
Gran parte de las investigaciones desarrolladas por las profesionales han sido financiadas con recursos otorgados por el Gobierno Regional, a través del Fondo de Innovación para la Competitividad Regional (FIC-R). Así, han trabajado en innovaciones diagnósticas en pro de detectar la enfermedad y, en definitiva, disminuir las altas tasas de mortalidad que el contagio genera.
Con la ejecución del proyecto FIC15-20, “Vigilancia Activa de Hantavirus”, se ha podido desarrollar la proteína de diagnóstico que ha sido validada por el Instituto de Salud Pública y que permite un diagnóstico más rápido y oportuno. «Lo importante», destaca la Dra. Otth, «es que como hemos dicho en otras oportunidades, ahora ese reactivo puede ser producido en nuestro laboratorio, lo que no ocurría antes, porque había que importarlo, con los altos costos que ello implicaba”. El proyecto también permitió tener una georreferenciación de los sectores en los que habita con mayor frecuencia el roedor. La iniciativa actual, FICR17-19, que considera la generación de un prototipo de kit de diagnóstico, posibilitará a los equipos de salud tener un diagnóstico rápido eficiente que apoye la toma de decisiones en forma preliminar.
En ese sentido, agradeció el apoyo del coinvestigador del proyecto, Dr. Alejandro Rojas, y su equipo, quienes trabajan con herramientas biotecnológicas que se orientan a la producción de nanobodies, tema que también forma parte del convenio con Corea. La investigadora destacó que el Dr. Rojas y su trabajo en la generación de una plataforma de nanobodies ha sido fundamental para la creación de esta alianza, pues ésta ha sido reconocida a nivel internacional por su aplicabilidad en nuevas alternativas diagnósticas.
Finalmente, indicó que, a través de las gestiones del Dr. Rojas, nuestra institución fue invitada a ser miembro de KOICID, organización que desarrolla actividades de cooperación internacional para dar respuesta a enfermedades infecciosas y cuya alianza permitirá una serie de investigaciones en conjunto (http://www.koicid.org).