<p align="justify">La obra <strong>Antígona de Sófocles</strong>, representada por alumnos del primer año del Bachillerato de la Facultad de Filosofía y Humanidades fue una lección de academia.</p><p align="justify">Si por academia -<em>akademeia</em>- entendemos lo que significó esta palabra en la época del esplendor griego de hace 25 siglos, veremos que implica el intercambio de diversas ideas y disciplinas intelectuales. La representación de Antígona de Sófocles, tuvo ese significado. </p><p align="justify">Basada en la leyenda de la Grecia central que relata la historia de la guerra fraticida entre los hijos e hijas del desgraciado rey Edipo, Entéocles, Polinice, Antígona e Ismene. Uno de lo hermanos, Polinice, conduce siete ejércitos contra la ciudad de Tebas y pierde la vida en lucha fraticida con Entéocles. </p><p align="justify">Creonte, el rey tirano, "cuya ventaja es imponer el silencio" le niega la sepultura al caído Polinice dejando su cuerpo fuera de los muros de la ciudad a merced de la aves carroñeras. La hermana de los dos hermanos, Antígona desobedece las ordenes de Creonte y busca ayuda en Ismene quien asustada, sólo obedece al mandato del tirano a lo que Antígona replica "si muero, partiré con mi conciencia tranquila porque las leyes el tirano no están por sobre las leyes de los dioses". Así Antígona al violar el mandato de Creonte busca la muerte, mientras el coro de ancianos sentencia "el pueblo que no entierra con honra a sus muertos no tendrá paz nunca".</p><p align="justify">La obra representada por estudiantes de primer año del Taller de Artes Escénicas de la carrera de Pedagogía en Lenguaje y Comunicación de nuestra institución, dirigido por el dramaturgo Roberto Matamala, académico de la Facultad de Filosofía y Humanidades; fue una clase de teatro clásico pero más allá de ello, fue una clase de ética y valores que resultó de sorprendente vigencia en nuestro días. </p>