La Comunidad San José de la Isla Teja, Valdivia, contó este 2010 con el apoyo de estudiantes de 4° año de la Escuela de Enfermería de la Universidad Austral de Chile, quienes realizaron diversas intervenciones de prevención en salud y otras, de acuerdo a las necesidades de la población.
Alrededor de 200 personas fueron las beneficiadas, principalmente adultos mayores con patologías crónicas, quienes recibieron atenciones como vacunación contra el Virus AH1N1; habilitación de box de atención y sala espera para toma de exámenes de glicemia y colesterol capilar; control de peso y talla; derivación a especialistas correspondientes y consejerías breves en alimentación saludable.
Con el apoyo docente de las Prof. Gema Santander y María Lina Ramos a través de los cursos Alto Riesgo en Enfermería y Liderazgo de la Atención de Enfermería en Salud, que imparte la Escuela de Enfermería UACh, las estudiantes aportaron a la comunidad a través de la metodología aprendizaje-servicio.
Participaron en directo apoyo a la comunidad, Angela Briceño, Karina Cancino, Marcela Muñoz, Daniela Oyarzo, Andrea Oyarzún, Daniela Quezada y Pamela Rozas, quienes realizaron una cuenta pública del trabajo desarrollado en las dependencias de la Parroquia San José de la Isla Teja, como cierre de sus actividades este año.
Más cerca de la gente
“Como enfermeras en formación y a través del aprendizaje-servicio nos hacemos parte de la comunidad y formamos una relación para conocer cuáles son sus necesidades”, señala Pamela Rozas, estudiante parte del grupo de intervención.
Agrega que “desde marzo estamos trabajando con esta población mayoritariamente de adultos mayores, y entre lo más importante realizado estuvo la campaña de vacunación a domicilio contra la influenza humana, ya que se encuentran lejos del centro de salud que les corresponde – Consultorio Externo Valdivia – y muchos están en calidad de postrados”.
«Agradecemos la colaboración de las socias pertenecientes a la parroquia – resalta – ya que, independiente que la respuesta de la gente fue buena, ellas nos ayudaron a acercarnos con mayor facilidad.
Para Flor Marina Vásquez, Presidenta del grupo de Acción Social de la Parroquia San José , el aporte de las estudiantes ha sido “muy beneficioso porque las chiquillas nos han entregado información y charlas, y también vacunaron mucha gente a domicilio que está postrada porque tenemos personas de mucha edad y es difícil llevarlas al vacunatorio del consultorio. Ojalá vuelvan de la Universidad a ayudarnos el próximo año”.