Con un promedio de notas de 6,517 la estudiante de cuarto año de Derecho de la Universidad Austral de Chile, Marianela Mancilla Bañares, obtuvo por esta carrera la Beca de Honor al Mejor Alumno de Pregrado del año 2011, concedida a los estudiantes que tienen el mejor rendimiento académico en sus respectivas carreras de acuerdo al Reglamento de Beneficios para Estudiantes de la Universidad Austral de Chile.
Para la estudiante puertomontina, que es primera generación en su familia que ingresa a la universidad, este beneficio fue un regalo inesperado: “me di cuenta una semana después de la publicación de la resolución con los resultados y aún estoy contenta, principalmente por la ayuda económica que esta beca implica, ya que tengo la Beca de Excelencia Académica que cubre la mitad del arancel y también tengo crédito del Fondo Solidario, por lo que un año menos de endeudamiento para mi es el mejor beneficio”, señaló Marianela orgullosa de este logro.
Marianela proviene de la ciudad de Puerto Montt, donde estudió en el Liceo de Niñas “Isidora Zegers”, y luego de tener toda su vida allí siguió su vocación hasta la capital de la Región de Los Ríos, “porque en mi ciudad no hay ninguna universidad tradicional que tenga el prestigio de la UACh, lo que se refleja en la calidad de abogados que egresan de sus aulas”.
La más feliz con esta beca es su madre, dice Marianela, quien reconoce que es un premio al esfuerzo personal y familiar que hay detrás de cada estudiante.
La Beca de Honor al Mejor Alumno de Pregrado tiene validez por el año académico en curso de la obtención del beneficio y cubre el total del valor del arancel de la carrera respectiva. Para hacer válida esta beca, los estudiantes favorecidos deben haber pagado previamente el derecho de inscripción de matrícula.
Vocación
“Cuando cursaba primer año medio viví una experiencia traumática, ya que uno de mis sobrinitos falleció por una negligencia médica. Ya que mi familia no contaba con recursos económicos para realizar una demanda este triste hecho quedó impune y desde allí cambié mi área de vocación profesional. Esta fuerte motivación marcó mi elección por Derecho”, recuerda Marianela.
Declara que le gusta estudiar Derecho, pero que como todos en algún momento ha vivido crisis vocacional frente a alguna asignatura más difícil que otra, cuando se siente presionada o pasa mucho tiempo sin ver a su familia.
Respecto de cómo visualiza su ejercicio profesional, Marianela señala que cuando ingreso a la carrera estaba segura que quería ejercería en el área penal, pero producto de que siente un especial apego hacia la gente ahora prefiere el ámbito civil.