A propósito de la conmemoración del Día Mundial de la Concientización del Autismo en Chile, que tuvo lugar el 02 de abril es importante reflexionar cómo hemos avanzado desde el programa PACE, según los lineamientos ministeriales en materia de atención a la diversidad e inclusión de nuestro estudiantado.
Desde el año 2020 el componente de Preparación en Enseñanza Media, PEM, comenzó el levamiento de información respecto a aquellos estudiantes pertenecientes a los Programas de Integración Escolar (PIE), provenientes de establecimientos educacionales adscritos al PACE UACh. Dicha acción permitió conocer sus intereses vocacionales y posibilidades de continuidad de estudios universitarios. El 2022 el componente de Acompañamiento en Educación Superior, AES, incorpora formalmente su Plan de Apoyo Individual (PAI), cuyo fin es brindar apoyos especializados, atendiendo a las necesidades educativas especiales de estudiantes universitarios en su primer y segundo año, robusteciendo el acompañamiento que ya venía brindando.
Cesia Cayuñir
A contar del 2024, el foco de PEM se amplía en este ámbito, dado que se suman nuevas acciones en el acompañamiento con 3° y 4° medio, donde se contempla llevar a cabo un levantamiento de información aún más específico respecto a las y los estudiantes con necesidades educativas especiales, como también la construcción de planificaciones para el desarrollo de habilidades del siglo XXI en talleres que apuntan a la diversidad del aula y a la vinculación con los equipos PIE a fin de generar diálogos pedagógicos respecto a las metodologías, estrategias y adaptaciones que se están implementando según las realidades de cada contexto. En el caso de AES seguimos avanzando en la formalidad de estos acompañamientos individuales.
Sin duda, los avances mencionados representan pasos importantes y necesarios con el objetivo de ir avanzando en un trabajo más consciente y respetuoso de la diversidad que tenemos en las aulas, con un enfoque inclusivo que nos permita ir acortando las brechas existentes, promover mejores trayectorias educativas, garantizar la participación de todas y todos los estudiantes, eliminando cada vez más las barreras del entorno. Nuestro compromiso profesional debe apuntar a la igualdad de oportunidades y equidad en la educación superior universitaria de nuestro estudiantado.