Puede convertirse en un tema de salud pública en un corto plazo. Los resultados que hasta ahora ha obtenido el Laboratorio de Cronobiología del Desarrollo, dependiente de la Facultad de Medicina de la Universidad Austral de Chile, son de relevancia mundial. “Vivimos en una cultura del trabajo que contempla largas jornadas laborales y sistemas de turnos que producen constantes alteraciones de sueño que son riesgosas para la salud”, explicó la Directora del Laboratorio, Dra. Claudia Torres-Farfán.
La cronobiología estudia los ritmos biológicos de los seres vivos, es decir de nuestro reloj biológico o circadiano, que regula diversos procesos como la atención, la memoria, el sueño y el comportamiento, entre otras.
La bioquímico y Doctora en Ciencias, quien lleva varios años estudiando este tema, aseveró además que “nosotros queremos demostrar que la cronodisrupción, una condición inducida por exposición alterada a fotoperiodo (turnos rotativos, jet-lag, etc), durante la gestación tiene efectos en el desarrollo en el útero y además afectar a largo plazo la vida de ese feto que será un adulto. Existe pleno consenso hoy en día que el ambiente uterino (relación materno-fetal) es clave para un tránsito adecuado a través de la vida. Entonces, la alteracion, incluso poco evidente del tránsito normal de un embarazo, exposición a dietas alteradas, exposición inadecuada a la luz (como ocurre en los turnos) etc, tendrán consecuencia en la progenie de estas madres, aumentando la incidencia de diabetes, cáncer e hipertensión. Produciendo una carga al sistema salud porque vivimos más pero con mala calidad de vida”.
Los investigadores de la UACh se adjudicaron en 2012 un Proyecto Anillo dependiente del Programa de Investigación Asociativa (PIA) de CONICYT por tres años, que les permitirá continuar con la labor del Laboratorio de Cronobiología del Desarrollo que ha sido reconocido a nivel internacional. “Estamos participando de importantes reuniones presentando nuestras líneas de investigación, que nos ha valido prestigio y validación de la metodología que estamos utilizando”, explicó.
De este modo, a través del financiamiento de este programa, el Laboratorio de Cronobiología del Desarrollo obtuvo fondos para investigar los mecanismos fisiopatológicos de enfermedades crónicas de adultos impuestas por la alteración circadiana prenatal, donde se han incorporado además investigadores de la Universidad de Chile y Concepción, además de otros expertos de Inglaterra, Escocia y Alemania.
La cronobiología del desarrollo se viene investigando hace casi 15 años, pero este grupo lo hace desde hace dos y se enfocará de ahora en adelante en el estudio del impacto de los turnos de trabajo nocturno durante el embarazo, sobre la aparición de enfermedades crónicas como la hipertensión arterial, entre otras. Por otro lado, se estudiará el rol de la melatonina, una hormona alterada por la exposición a la luz durante las horas de oscuridad, cuya supresión mediante la sobrexposición a luz durante esos periodos causan trastornos severos del sueño.