Con participación de representantes del Ministerio de Medio Ambiente (MMA) y de empresas vinculadas al ámbito de la acústica y control de ruido ambiental se llevó a cabo el segundo taller de difusión de los avances del proyecto FONDEF ID20I10333 “Sistema integrado de análisis de fuentes sonoras ambientales: Sistema FuSA”, que es ejecutado por académicos de los institutos de Acústica e Informática de la Facultad de Ciencias de la Ingeniería de la Universidad Austral de Chile.
La actividad, desarrollada en modalidad híbrida en dependencias del Pabellón Docente del Campus Miraflores, tuvo por objetivo avanzar hacia la etapa final del proyecto que permitirá probar y validar escenarios prototipos de uso del sistema de información acústica FuSA, basados en la detección y clasificación de fuentes sonoras e información acústica, especificando una taxonomía de fuentes sonoras relevantes que respondan a las necesidades particulares de distintos usuarios -instituciones públicas, privadas y personas naturales-, proponiendo una interfaz de visualización funcional.
Esta iniciativa se desarrolla en colaboración con cinco entidades asociadas que fueron parte de la jornada: Ministerio de Medio Ambiente y las empresas CAPTA, VitGlobal, Control Acústico y Acústica Marina.
El Director del proyecto, Dr. Enrique Suárez, precisó que el taller corresponde al segundo programado para esta iniciativa, cuyo objetivo fue evaluar el avance del estudio a 18 meses de su inicio y cuando restan seis meses de ejecución.
“La actividad fue muy exitosa en este sentido, pues logró mostrar un avance muy acorde con los fines del proyecto. Por otra parte, la participación de personas del proyecto y externas al mismo permitió discutir algunos aspectos que ayudarán a mejorar el trabajo en estos últimos seis meses. La participación de los profesionales de las entidades asociadas y de los investigadores internacionales ha permitido darle solidez y una correcta orientación al desarrollo tecnológico que llevamos en el proyecto FONDEF”.
Agregó el Dr. Suárez que este semestre se acordó con las entidades realizar un piloto con cada una de ellas, para probar el Sistema FuSA de acuerdo con las expectativas que cada una de las cinco entidades ha puesto en el proyecto. “Fue justamente este trabajo el que realizamos en una segunda parte del taller en la jornada de la tarde, cuyo informe compartiremos con ellos para validar los resultados que obtendremos en marzo de 2023”, detalló.
Por su parte, Igor Valdebenito, jefe del Departamento de Ruido, Lumínica y Olores del Ministerio de Medio Ambiente, resaltó la estrecha colaboración que existe entre esa cartera y el Instituto de Acústica de la UACh, así como la importancia que tiene el poder contar con información técnica a la hora de tomar decisiones.
“En nuestra gestión las acciones se basan en información técnica dura, objetiva, tanto desde el punto de vista del ruido como de los efectos, y este proyecto particularmente es súper importante, porque el producto del proyecto es el reconocimiento de las fuentes de ruido en un lugar específico. Y ¿Por qué es tan importante para nosotros en este momento? Porque nosotros estamos elaborando una norma de calidad ambiental para ruido, que será la primera norma de este tipo en Chile y en esa norma de calidad nosotros debemos identificar cuáles fuentes tienen mayor preponderancia en un punto de monitoreo”.
Agregó el profesional del MMA que la norma de calidad no identifica una fuente específica, sino todo lo que hay en el entorno. “Tenemos que saber cuál es el aporte del tránsito, cuál es el aporte de un grupo electrógeno, por ejemplo, porque al momento de establecer un plan tenemos que definir medidas más eficientes y, si en un lugar el tránsito es el más preponderante, haremos gestión en el tránsito. En otro lugar puede que una construcción sea lo más importante, haremos gestión en la construcción. Tiene estrecha relación con las medidas que en un momento vamos a gestionar”.
Por su parte, el gerente general de VitGlobal, Antonio Velásquez, representante de la plataforma Eruido, asociada al proyecto, destacó que es fundamental que existan nuevos canales de integración entre el sector privado y la academia.
“Nuestra empresa tiene una plataforma de monitoreo de ruido y de fabricación de equipamiento que se llama Eruido, que opera en Santiago y Concepción, con socios distribuidores en Argentina y México. Para nosotros es fundamental ser parte de estos nuevos canales de integración, donde podemos encontrar estas experiencias, porque sentimos que se genera mucha sinergia. En primer lugar, somos una pequeña empresa nacional, llevamos 20 o 25 años diseñando estas tecnologías y en particular en el tema de inteligencia artificial, nosotros llevábamos cinco años trabajando en esto, pero a un ritmo muy lento”.
Por lo anterior, Velásquez valoró que la alianza lograda a través del Proyecto FuSA ha permitido a la empresa acelerar su llegada al mercado con una solución de inteligencia artificial para monitoreo de ruido e identificación de fuente.
“Nosotros como entidad privada al estar en contacto con el cliente, con el mercado día a día, hemos podido ir orientando el producto que se va generando también a nuestra propia realidad de manera que es algo que nosotros no podríamos haber hecho solos, de ninguna manera. Entonces esto nos da la posibilidad de seguir estando en la punta tecnológica y trabajar en equipo, integrar equipos grandes de gente muy experimentada y poder acceder a estos fondos que son tan importantes para el desarrollo tecnológico. Tenemos que lograr que estas creaciones de las cuales nosotros estamos siendo parte lleguen al mercado, generen actividad económica, de manera que esto vaya fluyendo, vaya desarrollándose cada vez más”, concluyó.
Cabe señalar que el equipo de FuSA lo dirige el académico Enrique Suárez y lo integran, además, los investigadores Jorge Arenas y Víctor Poblete, del Instituto de Acústica, y Pablo Huijse y Matthieu Vernier, del Instituto de Informática.
Asimismo, en calidad de investigadores invitados participan el Dr. Guillermo Rey Gozalo, del Departamento de Física Aplicada de la Escuela Politécnica de la U. de Extremadura, España, y el Dr. Pierre Aumond, investigador de UMRAE, Univ. Gustave Eiffel, Nantes, Francia.