La charlas “Variabilidad interdecadal de la precipitación en Chile asociado a forzantes extratropicales”, dictada por el profesional José Vicencio, y “Condiciones climáticas observadas en Chile 2015 y proyección del verano 2016”, presentada por Juan Quintana, se realizaron el pasado 18 de diciembre en la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales de la UACh.
Ambos profesionales de la Dirección Meteorológica de Chile presentaron dos variables importantes relacionadas con la precipitación y la temperatura.
José Vicencio señaló que la idea de su presentación fue entender cómo cambia la precipitación en Chile a través de diferentes constantes. “La variabilidad de la precipitación en Chile está fuertemente relacionada a los patrones de circulación derivados de oscilaciones de gran escala proveniente de latitudes ecuatoriales como de latitudes altas. Debido a esto, es parte del clima del país el desarrollo de periodos de sequía o años altamente lluviosos, generalmente relacionado con la presencia de los ciclos de El Niño-Oscilación del Sur (ENOS) o Año de La Niña”, explicó.
“Sin embargo, el ENOS explica solo una parte de esta variabilidad. Para entender el comportamiento pluviométrico de los últimos 65 años, se analizaron los datos de estaciones meteorológicos que poseen un registro confiable y continuo. Los resultados indican que la precipitación en Chile presenta una tendencia lineal negativa significativa en la zona central y sur del país y en forma opuesta, tipo dipolo de anomalías, en la zona austral”, agregó.
La disminución de la precipitación más significativa de los últimos 65 años –informó- se presenta en la región central (30-37°S) y con especial magnitud en la última década, además de una disminución gradual en la zona sur (38-43°S) en gran parte del siglo XX y comienzos del siglo XXI.
Por otro lado, Juan Quintana, quien habló sobre Condiciones Climáticas Observadas en Chile 2015 y Proyección del Verano 2016, afirmó que “el régimen térmico en Chile durante 2015 se caracterizó por presentar las mayores anomalías positivas de temperatura máxima y mínima preferentemente en la costa norte y zona central y sur del país, con valores superiores a 1°C por sobre el promedio climatológico. En la zona austral se caracterizó por la presencia de anomalías positivas, pero concentradas más bien entre abril a agosto de 2015, cuya magnitud fue de 1.9°C en junio, seguido de una caída de las temperaturas a partir de septiembre de 2015, con anomalías negativas en torno a 1°C”.
Según el profesional los eventos de precipitación extrema se observaron primero en marzo de 2015 en la zona norte del país, con impactos sociales y económicos importantes. Dicha condición meteorológica fue originada por un centro de baja presión llamada “Baja Segregada”.
“En la zona central, la primera mitad del año 2015 se caracterizó por un descenso de la precipitación respecto a su valor medio climatológico, siendo junio de 2015, el más seco nunca antes registrado en Chile central”, agregó.
Según el profesor de la UACh, Carlos LeQuesne, tanto Ingenieros en Conservación de Recursos Naturales como Ingenieros Forestales analizan datos, “pero no conocemos bien los mecanismos, que es lo que está controlando que llueva más o menos, por lo que ésta fue una instancia para abrir el conocimiento a otras áreas”, afirmó.