En el marco del centenario del nacimiento de Luis Oyarzún Peña (1920, Santa Cruz – 1972, Valdivia) la Universidad Austral de Chile destaca el legado del escritor y académico de connotada trayectoria en el medio intelectual del país, coetáneo de la generación de Nicanor Parra y Jorge Millas, con quienes entablara larga amistad desde que se conocieran en el Internado Nacional Barros Arana, el famoso INBA.
Fue en el año 1997 cuando la UACh otorgó por primera vez el Premio Luis Oyarzún, creado en honor al destacado intelectual. El elegido para inaugurar este galardón fue Nicanor Parra, quien, en su discurso “Aunque no vengo preparado”, señaló: “Estamos en deuda con Luis Oyarzún/ El ensayista fuera de serie/ El Decano Perpetuo de Bellas Artes/ El Director Vitalicio/ De la Sociedad de Escritores de Chile/ El Viajero Total/ El Ministro de Fe de su generación/ El Orador Académico por excelencia”.
Importante legado
Según explicó el Director de Ediciones UACh, Dr. Yanko González, “recordar a Oyarzún, es recordar a lo más brillante que ha dado no sólo la literatura y el pensamiento estético, sino humanístico, en nuestro siglo XX chileno. Por ello, nuestra Universidad a través de su editorial, ha ido poco a poco recuperando parte de su obra, tanto la que se considera fundamental, como también aquella ‘lateral’, que no ha sido suficientemente relevada, pero que creemos parte del corazón definitorio de la obra y legado de Oyarzún, como Defensa de la Tierra. Entre otras razones libros como Defensa de la Tierra define muy bien la identidad intelectual de Oyarzún, ‘un escritor tábano’, como decía Gabriela Mistral, una pluma extraordinariamente aguda y sutil en sus observaciones, que incordia en estratos más profundos que la mera pulla o invectiva, pues nos cuestiona a nivel idiosincrático, cultural, en las antípodas de la ‘ebriedad’ de las ideas: siempre con delicadeza, ojo lúcido y pluma fina”.
En el marco de la conmemoración del centenario de su natalicio, Ediciones Universidad Austral de Chile reeditó este ensayo en una versión ampliada que incluye una prolija selección de ilustraciones de Claudio Gay, el botánico chileno Carlos Muñoz Pizarro y la ilustradora Francisca Veas Carvacho. Asimismo, se incorporó un anexo crítico y biográfico que contiene el estudio “El pensamiento ecológico de Luis Oyarzún” del Dr.(c) en Literatura Latinoamericana, Arnaldo Enrique Donoso; una crítica literaria de Hernán Díaz Arrieta, Alone, publicada en El Mercurio en 1974, y un texto biográfico de Hernán Poblete Varas, publicado en “Cuadernos del Centenario” por la Academia Chilena de la Lengua en 1985.
“Defensa de la Tierra”
Este libro fue presentado el viernes 27 de noviembre a las 11 horas en una edición especial del programa “Libros con Causa” de Radio Universidad Austral de Chile, que fue transmitida a través de su Facebook Live (Ver https://fb.watch/21bt-FyyRq/). Yanko González y Víctor Godoi, conductores del programa, recibieron como invitados al Rector UACh, Dr. Óscar Galindo; la Directora de Vinculación con el Medio, Dra. Leonor Adán; el especialista en ecología e integrante del Consejo Editorial de Ediciones UACh, Dr. Alfredo Erlwein, y el albacea de Luis Oyarzún, su sobrino, Eugenio Oyarzún.
En la oportunidad el Rector UACh, Dr. Óscar Galindo, felicitó la reedición de Defensa de la Tierra. “Además debo decirlo con mucha claridad: es un bellísimo libro y seguro la mejor edición que se ha hecho de él. Así es que felicitaciones a la editorial por este texto magnífico en su factura y, por supuesto, en su contenido”.
Recordó que “Luis Oyarzún pertenece a un grupo de intelectuales y escritores notables. Dentro de los escritores más conocidos está Nicanor Parra y dentro de los pensadores más conocidos Jorge Millas y, por supuesto, Luis Oyarzún. Fueron íntimos amigos y los tres contribuyeron mucho a la Universidad Austral de Chile, sobre todo en la etapa de su fundación. En el caso de Jorge Millas y Luis Oyarzún luego pasaron a ser parte de ella”.
Añadió que “hubo un diálogo permanente con esta institución y recogimos mucho de ese aporte y esa manera de entender la responsabilidad intelectual y estética como parte del quehacer universitario. Creo que a Jorge Millas se le debe mucho pero también a Luis Oyarzún que está menos visibilizado porque ha tenido y tuvo menos tiempo de permanencia en nuestra Universidad, pero le debemos muchísimo. Este libro en particular constituye obviamente un hito muy importante de pensamiento crítico y protoecológico o ecologista, como queramos llamarlo, que comenzaba a construirse por allá por los años 60… No hay ningún esfuerzo sistemático de la magnitud que desarrolla Luis Oyarzún en ‘Defensa de la Tierra’ y en verdad en toda su escritura”.
Vinculado a tradición humanista
La Directora de Vinculación con el Medio, Dra. Leonor Adán, destacó que este libro le parece muy importante para las generaciones futuras, para los que están empezando a formarse y los que no conocen tanto la obra de Luis Oyarzún. “Creo que se enraíza con una tradición humanista de la formación universitaria en Chile que es muy relevante y que muchas veces se operativiza, se planifica un poco, pero yo creo que lo que refleja la obra de Oyarzún, junto a la de muchos otros, es este esfuerzo por construir esta identidad con una reflexión teórica muy profunda. Hay una construcción que tiene total vigencia y urgencia en este minuto en que efectivamente hay que poder entender, vivir y habitar este planeta, las universidades, nuestras ciudades, con un sentido más profundo de la existencia”.
Por su parte, el especialista en ecología e integrante del Consejo Editorial de Ediciones UACh, Dr. Alfredo Erlwein, señaló que “si bien es cierto el libro no es alegre, es un llamado desesperado, lleno de pasión, lleno de hermosura, lleno de amor por la naturaleza y pienso entonces que es un gran motor de inspiración. Por lo tanto, estoy seguro que los jóvenes que lo lean también van a contagiarse con esa llamita”.
Por último, el albacea de Luis Oyarzún, su sobrino, Eugenio Oyarzún, también agradeció a la editorial de la Universidad Austral de Chile. “No es frecuente reeditar por tercera vez un libro, salvo con personajes como Neruda, Parra, la Mistral. Pero este libro y su tercera reedición a mí me parece notable y creo, como decía el Rector Galindo, supera a las otras dos y que ya era un desafío no menor. Yo hablaría de un libro casi nuevo”.
Luis Oyarzún
Estudió Filosofía y Derecho en la Universidad de Chile y Estética e Historia del Arte en la Universidad de Londres. Fue Decano y académico de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Chile, y profesor y Director de Extensión en la Universidad Austral de Chile, casa de estudios que honra su memoria legando su nombre al Premio Luis Oyarzún, consistente en un reconocimiento a contribuciones destacadas para el logro de relaciones armónicas entre seres humanos y la naturaleza. Entre otros, han recibido este premio Nicanor Parra, Douglas Tompkins y Sara Larraín.
Su privilegiada pluma se caracterizó por el cultivo de diversos géneros literarios, tales como el relato, la poesía, el ensayo, la crónica y el diario, donde se reflejaba su exhaustivo conocimiento y profunda preocupación por la naturaleza, destacando en este ámbito uno de sus escritos más fundamentales y pionero en la reflexión ecológica, “Defensa de la Tierra”, publicado de manera póstuma en 1973 por la Editorial Universitaria.
Como destacó el filósofo Jorge Millas en el prólogo que abre “Defensa de la Tierra”, Oyarzún “perteneció a la estirpe de estos contempladores de mirada libre y liberadora, con una conciencia exaltada de lo real, que no puede sino significar una exaltada conciencia del propio ser, una pasión… La pasión de ver fue para él una pasión de ser”.