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“En Valdivia aprendí que la profesión, las ciencias y las artes, en suma: el trabajo; adquiere un especial sentido humano, capaz de llenar todos los vacíos, cuando se encuentra una patria a quien servir, más aún si es menesterosa de ciencia y de cultura. La tarea puede ser modesta, pero la ambición y el egoísmo personal se apagan y aflojadas las insanas tensiones, adquiere relevante sentido vivificador la obra que se realiza en común”.
Esta confesión realizada por el Dr. Ítalo Caorsi (1922 – 2006) durante su discurso de ingreso como Miembro Correspondiente de la Academia de Medicina en 1975, fue una de las destacadas en el homenaje que recibió en la Universidad Austral de Chile, ocasión en la que además se realizó el lanzamiento del libro “Testimonios de Academia y Medicina”, que reúne los textos más importantes y significativos de este Padre Fundador UACh y pilar fundamental del desarrollo de la medicina en el sur del país.
El evento, que contó con el apoyo de la Unidad de Vinculación con Egresados en el marco del 50° Aniversario de la Escuela de Medicina, se llevó a cabo la tarde del jueves 14 de diciembre en la Sala Paraninfo de esta casa de estudios, Campus Isla Teja en Valdivia, contado con alta asistencia de autoridades académicas, docentes, ex docentes, estudiantes, familiares y amigos del Dr. Caorsi, quienes fueron testigos del respeto y cariño de quienes se sienten, de una u otra manera, influenciados por la vida y obra del homenajeado.
“Testimonios de Academia y Medicina” es una obra materializada por Ediciones UACh, compilada y editada por amigos y colegas de Caorsi: Esteban Rodríguez, Fernando Oyarzún y René Guzmán (1929-2009), -a su vez, todos connotados académicos de la UACh- que incluye asimismo una serie de testimonios de personalidades vinculadas a su legado. Entre ellos el ex rector UACh, Félix Martínez Bonati; el médico psiquiatra y exprofesor UACh, Héctor Pelegrina; el médico nefrólogo, Sergio Mezzano; el profesor de Literatura, Iván Carrasco; y sus hijos Carlos y Ma. Virginia; entre otros.
El encargado de dar la bienvenida a la ceremonia fue el Decano de la Facultad de Medicina, Dr. Eduardo Ortega, quien destacó que detrás de la historia “hay hombres y mujeres que tuvieron sueños y que lucharon por cumplirlos. Es nuestro deber reconocer a aquellos pioneros que pese a dificultades, lograron desarrollar proyectos complejos, díficiles, pero largamente esperados. El libro que hoy lanzamos es un documento de gran valor, que permitirá a las nuevas generaciones conocer el pensamiento y testimonio del maestro Ítalo Caorsi, quien no sólo fue un pionero en su especialidad de Anatomía Patológica, sino que un pilar fundamental en la creación de la Universidad Austral de Chile, el desarrollo de nuestra Facultad de Medicina y puesta en marcha de la Escuela de Medicina”.
El Decano también agradeció a los autores, por “entregarnos este valioso documento histórico”.
Lo que hacen los maestros
El libro fue presentado por sus autores, Profesor Catedrático UACh Dr. Esteban Rodríguez y Profesor Emérito y Maestro de la Psiquiatría Chilena, Dr. Fernando Oyarzún; por la Académica del Instituto de Lingüística y Literatura, Dra. María Claudia Rodríguez; y el Coordinador de Producción Editorial de Ediciones UACh, César Altermatt.
El Dr. Esteban Rodríguez entregó detalles sobre la vida de Ítalo Caorsi y sus escritos, enfatizando en la cercanía que tuvo con él, especialmente en el proceso de creación de la obra y sus últimos meses de existencia.
Acompañado de proyecciones con históricas fotografías, el Dr. Rodríguez repasó los momentos más trascendentales de la vida del Dr. Caorsi, haciendo énfasis en aspectos de su personalidad que lo acompañaron desde su niñez y lograron su consolidación familiar, profesional, académica y humana. “Ítalo Caorsi, notable patólogo y visionario universitario, es parte de la historia y del patrimonio cultural y humano de la Universidad Austral de Chile y la Medicina chilena”, destacó al inicio de su intervención.
“Así fue toda la vida de Caorsi… Una empresa humana admirable, capaz de iluminar a cada ser humano en sus deseos, decisiones y proyecciones. Esto es lo que hacen los maestros: mostrar con sus vidas el camino que vale la pena ir haciendo al caminar”, expresó. (Leer aquí intervención completa)
Por su parte el Dr. Fernando Oyarzún trató acerca de la importancia que tuvo Caorsi en su propia llegada como académico a la UACh, su dedicación a la Medicina basada en la persona y el legado que este concepto ha tenido en generaciones de la Facultad de Medicina. “Si Ítalo Caorsi te trae para acá, es para llenar un vacío que él intuye y lo palpa con su sensibilidad enorme”, aseguró.
César Altermatt relató sobre el proceso de desarrollo del libro, que se integra a la colección Patrimonio Institucional de Ediciones UACh. “El primer contacto que tuve con esta obra fue en 2007 cuando era periodista de la Dirección de Extensión (Vinculación con el Medio), momento en que se estaba trabajando en la conformación de nuestra editorial. El texto permaneció archivado unos años, esperando. Creemos que esperar no fue un error, el libro tuvo la paciencia de aguardar hasta que se creara la editorial. Valió la pena, no es lo mismo producir lo propio que entregar la creación a terceros, de esta forma en la obra final se mantiene el espíritu que sólo podemos sentir quienes formamos parte de esta comunidad universitaria”, recalcó.
La Dra. María Claudia Rodríguez, inició su presentación relatando una experiencia personal que le permitió conocer a Ítalo. “1985, era yo una estudiante de Pedagogía en Castellano y como muchos compañeros participaba en el Movimiento Estudiantil, en plena dictadura y rectores delegados en las universidades. Con la complicidad de un amigo, comenzamos una investigación sobre los estudiantes y profesores de la UACh que fueron exonerados y desaparecidos en los primeros años de dictadura. Entre los académicos que podíamos entrevistar, Ítalo fue uno de los pocos que se atrevió a hablar y además nos alentó a terminar este trabajo. La información detallada que nos proporcionó permitió elaborar una lista, desgraciadamente extensa, que titulamos Una verdad para no ovidar”.
La académica expresó haber comenzado con este testimonio porque “quiero sincerar el lugar desde donde leo este libro, lo hago desde la orilla del respeto y la admiración por Ítalo Caorsi, y desde el flanco académico convencida de la idea de Universidad que él promovió y que a veces se ve en color sepia y se tilda de romántica. Por eso tiene tanto sentido leer esta obra, para que retornen los colores”.
Diversas facetas
El homenaje incluyó tres testimonios, que permitieron ahondar en los diversos roles del Dr. Caorsi y cómo su legado se mantiene vigente.
Su nieta, María Eugenia León Caorsi, se refirió al ámbito humano y familiar de este Padre Fundador UACh. En un emotivo relato, dijo que con sus nietos siempre tuvo “una relación muy cercana, en la que parecía aflorar el niño interior que había en él. Era muy entretenido. Ustedes tuvieron el privilegio de conocerlo mejor en su dimensión profesional, nosotros lo recordamos y valoramos como el abuelo amoroso, siempre preocupado por su familia”.
El Académico de la Facultad de Medicina, Dr. Miguel Concha, rememoró entre otros aspectos no sólo la creación de Ítalo Caorsi, sino también el pensamiento universitario que nos dejó. ¿Qué impulsó a un joven médico de 32 años, a formar parte de un desmesurado pero clarividente proyecto de creación de la que sería la séptima universidad del país? Planteó durante su testimonio.
Al respecto señaló que el propio Caorsi dijo que había tenido “la fortuna de ver, como alumno y como docente ayudante, la transformación que se produjo en la Facultad de Medicina de la Universidad Católica de Chile en la década del 40”. Otra indicación de por qué ingresó a este proyecto, la da su percepción acerca del rol precursor que tuvo el Hospital Regional de Valdivia en la fundación de la Universidad. Concha recalcó que según Caorsi, “la concepción novedosa para la época de la creación de este Hospital y la selección de un decisivo grupo médico, le dio un carácter excepcional a la medicina local. Bajo esta positiva influencia se origina la Sociedad Médica de Valdivia que a su vez creó la Biblioteca Médica, previa a la Universidad. No cabe duda que el prestigio de este grupo médico que había llegado en el decenio anterior, influyó en la efervecencia que produjo la fundación de la UACh”.
El académico también enfatizó en que la juventud de los fundadores de la Universidad Austral de Chile, jugó un rol trascendental en el éxito de su consolidación.
El testimonio final estuvo a cargo del ex académico del Instituto de Pediatría y Nefrólogo Infantil, Dr. Fernando Olavarría. Para él, esta ceremonia “es el reconocimiento póstumo a uno de los grandes maestros de esta Facultad de Medicina, quien a través de sus escritos refleja la grandeza de su pensamiento, su afán permamente de hacer de esta casa de estudios cada día mejor, con una Escuela de Medicina ya consolidada en sus 50 años de existencia, que debe reconocer en Ítalo un pilar fundamentral en su creación y desarrollo”.
Junto con agradecer y reconocer a Esteban Rodríguez, Fernando Oyarzún y a René Guzmán (1929-2009) por la recoplicación y edición del libro, destacó la importancia de Caorsi en el desarrollo de la histopatología, especialmente en la zona sur austral del país. “Con su apoyo, formamos un grupo de estudio en patología renal que se reunía cada semana, el cual se hizo fuerte tanto en investigación como en lo asistencial, siendo un referente actual para la patología renal”.
Además resaltó el aspecto humano y familiar de Ítalo, describiéndolo como afectuoso, amigo de sus amigos, siempre dispuesto a escuchar y entre bromas muy propias de su persona, entregar un buen consejo. También contó algunas anécdotas con él, haciendo hincapié en su faceta como tenista.
Concluyó invitando a leer este libro. “Quienes lo conocimos nos reencantaremos con su pensamiento universitario, su lucha en pro de conseguir su objetivo, entrega a la docencia e investigación, calidad como persona, su amistad. Las nueva generaciones, encontrarán un ejemplo digno de emular muy afín con el lema de nuestra Universidad, Libertas Capitur: La Libertad se Conquista. Y se conquista como Ítalo nos enseñó, en la búsqueda de la verdad, la entrega generosa y desinteresada, se conquista cuando se logra con esfuerzo y entusiasmo la cristalización de un sueño visionario, cuando los valores están por encima del interés puramente material”.
Para escuchar los discursos, presentaciones y testimonios completos, ver video aquí (de preferencia usar navegador Mozilla Firefox).
El homenaje finalizó con un regalo musical de estudiantes de la Escuela de Medicina, en el que Diego Robledo interpretó en guitarra el tema de Andy Mckee, For my father, para luego unirse a Belén Gallardo en flauta traversa e Ignacio Forttes en voz, con una especial versión de Run Run se fue pal norte de Violeta Parra.