Gracias al financiamiento del Fondart Regional del Ministerio de Cultura, Arte y Patrimonio, y a la iniciativa del Taller Patrimonio y Restauro, se dio inicio a la Escuela de Carpinteros cuya convocatoria generó mucho interés entre estudiantes de Ingeniera Forestal, Arquitectura, carpinteros y la comunidad en general. Todos unidos por el deseo de rescatar el patrimonio que constituyen las antiguas edificaciones de madera del sur de Chile.
La Escuela de Carpinteros tuvo su inauguración el lunes 1 de octubre en la Facultad de Arquitectura y Artes, donde autoridades de la UACh y el equipo de arquitectas de Patrimonio y Restauro, dieron la bienvenida a los participantes.
El Decano de la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales de esta casa de estudios, Dr. Alfredo Aguilera, resaltó la importancia de la madera como material de ingeniería del siglo XXI, pero también como “un noble material presente en Chile en tantas construcciones de carácter histórico y patrimonial. Punucapa, Chiloé, la restauración y el patrimonio, son palabras claves que confluyen en este curso de carpintería, cuyo espíritu es salvaguardar las técnicas tradicionales de las edificaciones de madera en el sur”.
Por otro lado, el Director de la Escuela de Arquitectura, Prof. Cristian Valderrama, comentó que esta iniciativa confirma el compromiso de la escuela y la clara necesidad de consolidar aún más el desarrollo de la arquitectura en madera como una línea clave y estratégica. A la vez, lamentó que estas tradiciones constructivas se estén perdiendo e indicó como una de las principales razones a “la pérdida de conocimiento, la memoria y el oficio de trabajar con madera”.
Enfoque práctico
La arquitecta del Taller Patrimonio y Restauro, Macarena Almonacid, explicó que los contenidos del curso son variados, abordando conceptos y criterios de restauración patrimonial y patologías de la madera. “Son clases de opinión donde esperamos que los participantes se acerquen a un enfoque personal respecto del patrimonio y cómo esto podría llegar a ser una herramienta de desarrollo en el futuro”, indicó. Sin embargo, el trabajo intensivo está en la práctica, donde se considera la construcción de un modelo a escala de una edificación, la cual estará hecha solo con ensambles y empalmes. “De esta forma, los asistentes, además de conocer cada detalle de unión, conocerán su funcionamiento estructural”.
Se trabajará con maderas nativas, principalmente de tepa, pues es más blanda para trabajar. También se utilizará madera de canelo y coihüe. “El ejercicio consiste en trabajar con martillo y formón, como se hacía antiguamente. Si bien vamos a utilizar un par de otras herramientas, la clave de este ejercicio es trabajar con las manos”, explicó. Este trabajo práctico se desarrolla en el taller de la Facultad de Ciencias Forestales y Recursos Naturales.
El objetivo final de este curso es poner en valor estas construcciones y visibilizar la técnica, tarea muy importante para Juan Cárcamo, maestro carpintero mayor, quien se ha especializado restaurando iglesias en Chiloé. “Es un orgullo haber aprendido y ahora enseñar este trabajo que se hizo con mucho esfuerzo. Quiero que la gente vea cómo se trabaja, que aprendan y compartan con su entorno lo aprendido”.