En el marco de los encuentros de Mindfulness y Compasión en tiempos de Covid-19 que se realizan todos los martes dirigidos por el Dr. Gerardo Rivera, Docente del Instituto de Neurociencias Clínicas e Instituto de Estudios Psicológicos de la Universidad Austral de Chile y psiquiatra en CESAMCO Amulen del Servicio Salud Valdivia, se realizó la jornada de “Alegría y Compasión”, a cargo del Psicólogo Gonzalo Brito.
La sesión inició, como es habitual, con una pregunta para atender a cómo estamos y qué necesitamos, para posteriormente realizar una práctica meditativa inicial de bienvenida dirigida por el Dr. Rivera, quien también recitó frases de Volver a los 17 de Violeta Parra, para luego dar paso a la charla y la conversación.
El profesional invitado comenzó destacando el espacio de encuentro sostenido por varios meses, explicando que alegría en sanscrito se dice Mudita y que tiene relación con la alegría empática que surge cuando apreciamos que a otro/a le vaya bien, sentir alegría de la felicidad, de la salud, dado que la alegría de otro/a es mi propia alegría. Con esto, señaló: “ya no padecemos de envidia, ni celos, ni miramos a las personas desde arriba de manera comparativa”.
Reforzó la definición de compasión, preguntando a los asistentes sobre su significado, recogiendo sus propias definiciones compartidas y experiencias, para luego complementar que “todas las definiciones dadas de compasión son descripciones positivas, hedónicas. Connotaciones positivas de que algo bueno está pasando, cuando esta la compasión presente, donde, sin embargo, hay una situación de sufrimiento. La compasión puede transformar algo que es difícil en algo que puede ser positivo”.
En este sentido, añadió, cuando los pacientes son tratados con compasión, los resultados son más favorables tanto para ellos como para el equipo de salud a cargo de su cuidado. “Cuando nuestro cuerpo está en dar y recibir cuidados, nuestro sistema nervioso está óptimo. Se activa nuestra corteza prefrontal, que tiene que ver con el amor filial, de cuidado de madre a hijos/as, regula la amígdala y se activa nuestro nervio vago, que nos ayuda a regular la sensación de amenaza y fluyen endorfinas y otras sustancias buenas para nuestro cuerpo”.
Componentes de la compasión
Al respecto, el psicólogo señaló los siguientes puntos como componentes de la compasión, donde la alegría es parte fundamental.
- Respuesta constructiva frente al sufrimiento, tomar conciencia, que parece algo obvio, pero al parecer, los seres humanos no son tan buenos para ver el sufrimiento.
- Resonancia empática, que parte de la empatía visceral, que es lo que nos ayuda a conectar con el otro.
- Intención de aliviar y prevenir el sufrimiento, preguntarse qué hago yo para aliviar el sufrimiento en mí y/o en los demás.
- Motivación compasiva, encontrar alguna vía de acción que permita aliviar sufrimiento propio como el de los que me rodean.
- Alegría, el brillo cálido de la compasión. Cuando se hace algo bello y noble por otro/a es una experiencia compasiva. Citando a Einstein, señaló: “El ego es una ilusión óptica de la conciencia”.
Y agregó: “Para salir de lo que estamos viviendo a nivel nacional, necesitamos sistemas nerviosos resilientes. No mirar la compasión desde el sufrimiento sino desde la alegría. Meditar activa estos estados y va construyendo estructuras, por eso le llamamos práctica. Si repetimos varias veces la compasión se vuelve un rasgo, por neuroplasticidad, el cerebro no puede evitar hacerlo, generando la estructura que sostendrá esta habilidad. Es un entrenamiento conductual a través del cultivo de una psicología que trae algo bueno para mí y para los demás”.
Recalcó además que la alegría es prestar atención a la bondad, a la nobleza o a lo que anda bien en nuestra cotidianidad. “Nutrir un colchón en conexión con el ser y ser más gozadores. Bajar nuestros umbrales de asombro y de disfrute, como por ejemplo apreciar el movimiento de un árbol en el viento, la belleza del gato estirándose, los colores de la puesta de sol, y conectar con nuestros valores centrales. Como la alegría de hacer algo que tiene que ver con nuestros valores, con lo que nos importa en la vida, dedicar tiempo a esto lo más posible, todo eso nos hace resistentes frente al sufrimiento”, dijo Gonzalo Brito.
El académico cerró su participación con una práctica referente a este goce, tocando en guitarra Volver a los 17 de Violeta Parra, cuyos versos fueron leídos al inicio de la sesión por Gerardo Rivera.
“Lo que puede el sentimiento
No lo ha podido el saber
Ni el más claro proceder
Ni el más ancho pensamiento
Todo lo cambia el momento
Cual mago condescendiente
Nos aleja dulcemente
De rencores y violencias
Solo el amor con su ciencia
Nos vuelve tan inocentes
El amor es torbellino
De pureza original
Hasta el feroz animal
Susurra su dulce trino
Detiene a los peregrinos
Libera a los prisioneros
El amor con sus esmeros
Al viejo lo vuelve niño
Y al malo solo el cariño
Lo vuelve puro y sincero”
Finalizaron el encuentro ambos académicos con el poema de “Las buenas noticias” de Thich Nhat Hanh.
Próximo encuentro
Se invita para los próximos martes a las 15:00 hrs. al espacio comunitario de mindfulness y compasión como una forma de sostener y aliviar el sufrimiento que nos aqueja en el día a día escribiendo a cultiva.mindfulness@gmail.com o entrando directamente a la sesión a través del siguiente link.
Join Zoom Meeting
https://reuna.zoom.us/j/99361784113?pwd=SHpwM0pIbXovT0dyMVd6VDNPN213Zz09
Meeting ID: 993 6178 4113
Passcode: 663820