En Chile, tradicionalmente, se han usado insecticidas de los grupos organofosforados y piretroides en el control de T. absoluta, los cuales ya han mostrado pérdida de efectividad en algunas regiones del país.
Por lo mismo, se han incorporado nuevos ingredientes activos, con modos de acción diferentes, tales como abamectinas, nereistoxinas y espinosinas. Sin embargo, poblaciones resistentes a estos productos han sido reportadas en Brasil y Argentina.
Con el objetivo de corroborar la información disponible, en nuestro país, sobre efectividad de insecticidas utilizados y de determinar la eficacia de nuevos productos, se evaluó la efectividad de insecticidas de cinco grupos químicos sobre larvas de T. absoluta, provenientes de cultivos de tomates de distintas regiones del país.
En este contexto la Dra. Maritza Reyes Carreño, del Instituto de Producción y Sanidad Vegetal de la Facultad de Ciencias Agrarias de la Universidad Austral de Chile, efectuó el Proyecto FONDECYT 11080074 “Mecanismos metabólicos y espectro de resistencia a insecticidas en poblaciones chilenas de polilla del tomate”, que ya tiene resultados.
Como era esperable –explica la investigadora- las menores mortalidades fueron obtenidas con productos pertenecientes a grupos químicos, tradicionalmente, utilizados en el manejo de T.absoluta, como los piretroides y organofosforados, para los cuales un 90,9 (cipermetrina) y 87,5% (clorpirifos) de las poblaciones evaluadas resultaron resistentes.
Sin embargo, agrega, también se observó una efectividad reducida del insecticida spinosad, el que sólo presentó cierta eficacia en tres de las ocho poblaciones en las que se evaluó (62,5% de poblaciones resistentes).
“La situación observada fue muy diferente para los productos Cartap y Abamectina, los que resultaron efectivos para la mayoría de las poblaciones estudiadas. Sólo una población mostró una mortalidad reducida frente a Cartap, mientras todas resultaron susceptibles a Abamectina”, indica la Dra. Reyes.
Importancia Directa para los Agricultores
Actualmente, existe un significativo número de insecticidas que no son eficientes para el control de T. absoluta en Chile, estos dos aún estarían funcionando en el control de la plaga. Debido a esto, es imprescindible utilizarlos de manera racional para no comprometer su durabilidad, evitando el desarrollo de resistencia, recalca la académica.
Asimismo, indica que cada temporada, los productores de tomate en Chile deben realizar frecuentes aplicaciones de insecticidas para reducir las pérdidas en el rendimiento y para evitar disminución en la calidad de los frutos.
Es vital tener en cuenta- a su juicio- que el uso de insecticidas puede producir aumentos en los rendimientos de los cultivos, al reducir el daño producido por los insectos plaga, sin embargo el alto número de aplicaciones lleva consigo un aumento de los costos de producción y conduce al desarrollo de resistencia.
“Sin las medidas de manejo adecuadas, T. absoluta puede producir pérdidas que superan el 90% en producción de tomate, consecuentemente es considerada una plaga clave para el cultivo”, enfatiza la Prof. Reyes.