“Son cinco los elementos de la forma urbana que promueven una mayor accesibilidad peatonal en los barrios”, dice el Dr. Zumelzu, del Instituto de Arquitectura y Urbanismo de la Facultad de Arquitectura y Artes de la Universidad Austral de Chile y del Observatorio de Sostenibilidad y Estudios Urbanos del Sur Austral OBSUR, quien además considera a los barrios como unidades clave dentro de las ciudades.
El investigador desarrolla el tercer año del proyecto FONDECYT de Iniciación N° 11160096, financiado por CONICYT, trabajo que plantea cinco criterios de una mayor accesibilidad entre los cuales está la densidad de viviendas, la diversidad de usos de suelo, la calidad del espacio público y el uso mixto de áreas verdes. “Los resultados muestran que la elección de rutas que toman las personas para llegar a un destino no se define por la ruta más corta, sino más bien por su calidad espacial”, explica Zumelzu.
Fueron dos sectores estudiados en Isla Teja. Por un lado, el barrio Histórico de Isla Teja y, por otro, el sector Santa Inés. En ambos casos, se presentan bloques de manzanas bien conectados y muy convenientes para promover la actividad peatonal. Lo que sí varía es la agrupación de comercios y servicios.
En cuanto a la metodología de estudio, el Dr. Zumelzu explica que fueron utilizados tres métodos, los cuales sirven para evaluar no sólo las condiciones morfológicas de los barrios que influencian en la transitabilidad, sino que también qué factores del entorno inciden en la elección de rutas y cuál es la distancia que una persona está dispuesta a caminar entre sus puntos de interés.
Los cinco criterios mencionados anteriormente son parte de lo detectado en el barrio Histórico de Isla Teja; las personas no prefieren una ruta más corta para llegar a su destino, sino la que presente mayor calidad espacial; los peatones prefieren caminar por sitios con mayor presencia de antejardines, áreas verdes en las calles y alta calidad de infraestructura, como son veredas más anchas, frentes con mayores vitrinas y número de accesos residenciales.
“Justamente, los muros ciegos, la ausencia o baja presencia de áreas verdes y la disminución del tamaño de las veredas en las calles afectan negativamente en la elección de rutas y, en consecuencia, la accesibilidad”, detalla el experto.
El Dr. Zumelzu comenta que, pese a que no permiten generalizar, estos resultados sirven para “comprender el valor peatonal que poseen diversos barrios en Valdivia, cuáles son los factores a considerar en su planificación y la importancia de incorporar estos factores en la formulación de planes reguladores comunales, a fin de direccionar hacia una transformación urbana positiva de las ciudades del sur de Chile hacia un futuro más sostenible”.
Finalmente, el estudio recomienda que las iniciativas asociadas a la planificación urbana apunte a los barrios como unidades territoriales fundamentales para el desarrollo humano y la generación de condiciones necesarias para el fortalecimiento social y económico local.