Hondo pesar existe en la Universidad Austral de Chile por el sensible fallecimiento del Dr. Manfred Max-Neef, ex Rector, Profesor Titular Catedrático y Profesor Emérito de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas (FACEA), donde también ocupó importantes cargos.
“Agradecemos a Manfred su compromiso, gestión y especial contribución al desarrollo institucional de nuestra Universidad. Expresamos nuestras sinceras condolencias a su esposa Gabriela, familiares, amigos, amigas, como también a toda la comunidad de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas”, manifestó el Rector de la UACh, Dr. Óscar Galindo.
El Prof. Juan Carlos Miranda, Decano de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas, de la cual el catedrático fue Profesor Emérito, expresó las condolencias a su familia y lamentó la partida, expresando que “el legado del Profesor Max Neef va a quedar en nuestra Facultad y en toda la universidad. Fue una persona que soñó y contribuyó a un mejor país. Creyó que un mundo mejor podía ser posible a través de la Economía Ecológica, lo que le costó ser incomprendido muchas veces. Aquí su legado va a marcar el sello distintivo dentro de las Facultades de Economía de Chile y el mundo”.
Vida y trayectoria
«Desde muy temprano de nuestra llegada a Valdivia decidimos que aquí nos queríamos quedar para siempre. Primero porque es una región y una ciudad con una calidad de vida espléndida, lo cual sin embargo no sería suficiente si el lugar al que uno le dedica su trabajo no fuese algo igualmente atractivo. En ese sentido le hemos tomado un extraordinario cariño a la Universidad Austral y la siento profundamente como mi casa. De tal manera que mi compromiso con la Universidad es existencial”. Fue lo que dijo el Dr. Max-Neef cuando en el 2010 fue reconocido como Profesor Titular Catedrático de nuestra Universidad.
Tras 25 años de destacada trayectoria en nuestra Universidad, cruzada por una decisión familiar conversada desde un principio con su esposa Gabriela, ese compromiso existencial se vio reflejado en aportes significativos que probablemente transcenderán esta época y cuyos frutos conocerán las futuras generaciones.
Su dilatada trayectoria académica se inicia en la década del ’50, la que ha estado caracterizada por su dimensión internacional, articulando la actividad académica con el ejercicio profesional.
Su contribución a la gestión de la Universidad Austral de Chile se inicia en el año 1994 en la Rectoría por dos periodos consecutivos. En esa época se construyó el Aula Magna, un espacio donde se desarrollan las ceremonias universitarias más relevantes de nuestra Institución. Esto solo por nombrar una de sus obras.
Una vez integrado a la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas se desempeñó como Prodecano y Director del Instituto de Economía. Durante su permanencia en la Facultad, además de colaborar en docencia de pregrado y postgrado, dirigió proyectos postdoctorales de estudiantes extranjeros y tesis de Magíster. Además, mantuvo su condición de Profesor Visitante e invitado como expositor en múltiples universidades de América Latina, Europa, Estados Unidos y África.
Su trayectoria en publicaciones se ha caracterizado por su amplitud y diversidad. Relevantes son sus aportes a las ciencias sociales por medio de la edición y autoría de libros, además de la participación en libros con diversas contribuciones. Ejemplos de ello son los libros “Desarrollo a Escala Humana”, “La Economía Descalza”, “La Economía Desenmascarada” y “Economía Herética”, entre otros.
Ha publicado igualmente diversos artículos en revistas ISI y colaboraciones en revistas con comité editorial y otras. Asimismo, ha participado continuamente en conferencias y congresos. Ha sido invitado a integrar organismos académicos y sociales nacionales e internacionales y ha sido consultor de diversos organismos internacionales.
Doctorados Honoris Causa
También ha recibido relevantes distinciones entre las que destacan el Premio Nobel Alternativo (1983) y 4 Doctorados Honoris Causa, además de otros reconocimientos internacionales.
Su trabajo, pensamiento y creatividad ha contribuido al mayor posicionamiento de la Universidad Austral de Chile en el mundo. Sobre todo porque va en la línea de lo que la UACh se propuso desde un principio: ser una “una Universidad para el mundo”, como señaló el Rector Fundador Eduardo Morales Miranda.
Esta contribución también se ha visto reflejada en la creación del Magíster en Desarrollo a Escala Humana y Economía Ecológica, que busca construir soluciones creativas a los problemas del desarrollo y cuenta con un alto porcentaje de estudiantes extranjeros.
Esta línea de trabajo se corona con la instalación del Right Livelhood College Campus Austral, que permite, entre otras iniciativas, conectar a tesistas de magíster con otros premios Nobel Alternativo del mundo.
No podemos no mencionar la firme difusión de una mirada con foco en el desarrollo sustentable y en el diálogo entre las diferentes disciplinas, encantando a otros académicos y a no pocos estudiantes que han asistido con entusiasmo a sus diversas conferencias e intervenciones en nuestra UACh.
Síntesis de lo anterior es la puesta en marcha del Centro Transdisciplinario de Estudios Ambientales y Desarrollo Humano Sostenible de la Universidad Austral de Chile, conocido por todos (as) como CEAM. Un espacio que ha permitido vincular de manera decidida a la Universidad con las problemáticas socioambientales del territorio.
A fines de marzo fue homenajeado en una ceremonia que permitió dar cuenta del aporte y proyección de un pensador y creador que, como bien señaló su amigo, el Decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales UACh, Dr. Juan Andrés Varas, en una entrega de reconocimiento realizada el año pasado, el profesor Max Neef ha tenido entre 15 o 20 propósitos importantes, entre los cuales destacó tres “puertos vitales”. Primero, su lealtad irrestricta con la familia, con los amigos y con su gente, incluyendo sus alumnos; y segundo, su integridad. Además de su aporte a su disciplina desde la divergencia.
Sin lugar a dudas su historia personal (con hitos como el haberle dado la espalda a la industria en 1957 para dedicarse a estudiar los problemas de los países en desarrollo) también seguirá siendo fuente de inspiración para la juventud que muchas veces no solo busca estudiar una carrera, sino también llegan a las aulas tras un sentido de vida, una forma de aportar y mejorar la sociedad.
Su pensamiento se ha transformado en acción y en obras que seguirán inspirando el futuro de nuestra Universidad, donde es fundamental tener esta mirada transdisciplinaria para abordar los problemas globales y sus impactos en el territorio. Porque como señaló el profesor Max Neef, «la economía está para servir a las personas y no las personas para servir a la economía», frase que concuerda plenamente con el quehacer de una Universidad como la nuestra que posee una importante función pública y vinculación con el medio.