Una conversación amena y cargada de experiencias en el ámbito personal, profesional y musical sostuvieron tres artistas, de renombre nacional e internacional, con coordinadores de American Corner de las universidades Católica del Norte y Diego Portales, Alfredo González y Valentina Alfaro, respectivamente, en el marco del ciclo de entrevistas y sesiones, que se realizaron el pasado 13, 14 y 15 de julio, para conmemorar los 245 años de la Independencia de los Estados Unidos.
El primer día de actividad contó con la participación del profesor asociado y Decano de la Facultad de Arquitectura y Artes de la Universidad Austral de Chile (UACh), Dr. Felipe Pinto d’Aguiar, quien cuenta con un Doctorado en Artes Musicales en Estados Unidos y con años de experiencia como docente en la Universidad de Boston y Massachusetts. En la ocasión compartió cómo su conexión con Estados Unidos ha influido en su trayectoria y perfeccionamiento musical, al darle la posibilidad de conocer música nueva y de trabajar con ensambles e intérpretes, que considera uno de los mejores del mundo, como el cuarteto de cuerdas Jack Quarter.
Asimismo, el artista sostuvo que la internacionalización le permitió conectar con otros proyectos musicales en países como China, Inglaterra, Italia, Grecia y Suiza, lo que ha tenido un impacto en las composiciones de sus obras, de las cuales, dio a conocer algunas en medio de la entrevista, entre ellas, el remake que escribió para un cuarteto con dos flautas, clarinete y saxofón que la interpretaron colegas que estaban haciendo su master y doctorado en la universidad norteamericana de Boston.
Finalmente, expuso que recientemente lanzó un álbum físico y digital con obras de su autoría para guitarra, y para ello, contó con la colaboración del guitarrista Patricio Araya. Además, está trabajando en un proyecto de creación para violín, que es un encargo para el profesor Gonzalo Beltrán de la Universidad Católica de Chile.
El segundo día del ciclo de entrevistas y sesiones musicales contó con la participación de la Doctora en Artes Musicales de la Universidad de Rutgers, Nueva Jersey, Hingrid Kujawinski, quien además tiene una maestría en Dirección Coral y Piano Colaborativo en la Universidad de Mansfield, Pensilvania; y actualmente es la Directora del Coro UACh y profesora asociada en la carrera de Artes Musicales y Sonoras de la misma universidad. Ha tenido la posibilidad de trabajar y hacer música en distintos países y compartir a sus estudiantes la importancia de leer música. Al respecto, sostuvo que “si se aprende bien a leer música, después se podrá leer la música de cualquier otro país, ya que se encontrarán con la misma nomenclatura musical, además una cultura puede utilizar elementos de otras para sus creaciones”.
También habló de la influencia que tuvo en sus proyectos musicales la estadía en los Estados Unidos, manifestando que “yo me considero una artista intérprete de las obras creadas por otros compositores, entonces me sirvió que allá la cultura coral es muy grande y hay muchos coros de todos los niveles. Tuve la oportunidad de participar en buenos coros con excelentes profesores, lo que me sirvió para aprender a enseñar mejor, y saber cómo interpretar una obra de mejor forma, a partir de la fecha de su composición y cultura. Además aprendí a cultivar la colaboración con compositores, por lo que actualmente estoy trabajando con los chilenos Héctor Garcés y la poeta Verónica Zondek en una composición para el Coro UACh”, enfatizó.
La tercera jornada fue con Christian Gálvez, bajista, compositor y productor chileno, que se ha desarrollado mayormente en el ámbito del jazz y la fusión, fue fundador del sello discográfico Pez Records y ha sido director musical de artistas nacionales e internacionales. Esta sesión fue presentada por Valentina Alfaro, quien luego dio el pase al guitarrista, compositor y productor musical, Felipe Duhart, para realizar la entrevista.
Gálvez partió la sesión con un stand up de jazz, luego comentó que “este estilo musical se hizo reconocido porque muchos solistas fueron muy inteligentes y tomaron la música popular como influencia, además, las características que lo hacen universal es la melodía, el ritmo y la armonía, y cualquier música que tenga estos tres elementos, y en un alto estándar, va a conseguir una música bella, y a esto el jazz le agrega la carga emocional, a partir del contexto en el que surgió en pleno Holocausto”.
Por otro lado, Gálvez añadió que desde su niñez tuvo acercamiento con el jazz, ya que su familia escuchaba a Count Basie, entre otros. Además, cuando viajó por primera vez a EE. UU. estuvo en Chicago, donde valoró cómo se siente y vive el blues, siendo esa experiencia la que ha moldeado su trabajo musical. “Creo que cuando eres artista toda experiencia de vida se mete en una mochila y después se demuestra arriba del escenario, y ese viaje también cambió mi forma de verla y tocarla, ya que en Chicago aprendí sobre la libertad absoluta de la música y en Los Ángeles conocí a la banda de Stanley Clarke y toqué con ellos como bajista, experiencia que me permitió disfrutar al máximo de la música”, concluyó.