Durante los días 19, 20 y 21 de febrero de 2010, y en el marco de las actividades del Verano en Valdivia, se realizó la XXIª versión del Campeonato Abierto Anual de Golf organizado por el Club Santa Elvira, el cual, desde este año en adelante, se denomina «Copa Alfredo Schüler Von Delitz».
Este tradicional evento deportivo congrega año tras año a los mejores jugadores de golf provenientes de diversos clubes nacionales y del mundo entero. En esta ocasión, el Abierto tuvo la destacada presencia del golfista valdiviano, más de 30 veces campeón en Chile, con destacada participación en circuitos internacionales, y nieto del Decano fundador de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UACh, Felipe Aguilar Shüler, quien desarrolló diversas clínicas durante la jornada, participando con jugadores y público en general.
«Don Alfredo fue de los socios fundadores de Santa Elvira, siempre motivado con el golf, siempre protegiendo a su club, siempre cuidándolo y otorgándole lo mejor. Siempre apoyando mucho a Felipe, sobre todo cuando él, un niño, no quería venir a jugar; ahí don Alfredo lo traía igual, inculcándole la responsabilidad y el amor por la disciplina. Don Alfredo fue una persona seria y un gran golfista, así que para nosotros como Club es un honor y un orgullo tener el campeonato con su nombre, y más aún si tenemos aquí al nieto presente, un valdiviano reconocido a nivel mundial», destacó el Capitán de Santa Elvira, Ricardo Rodríguez A.
Felipe destacó también, orgulloso, el que desde este año el torneo lleve el nombre de su abuelo. «Que el torneo lleve el nombre de mi abuelo me enorgullece. Creo que el tata fue una persona que apoyó mucho al Club desde sus inicios, cuando Santa Elvira estaba aún en Isla Teja, así que este reconocimiento me alegra muchísimo».
Aguilar se refirió también a la gran influencia profesional que «El Tata» -como lo llama cariñosamente- significó en lo que él es hoy. «Yo no recuerdo haber jugado un solo torneo de golf sin que me haya acordado del tata. Y es que él fue mi influencia en un 100 por ciento. Fue él quien a los nueve años me enseñó a jugar golf, me regaló mi primer juego de palos y me sacó de Valdivia por primera vez a un torneo, así que marcó mi vida golfística desde un comienzo y eso siempre está en mí».
Valdivia: semillero de estos dos grandes golfistas
Sin duda alguna que por la ciudad de los ríos han pasado hombres que dejaron huella. Uno de ellos fue Alfredo Shüler Von Delitz, campeón regional y nacional de golf, destacado en 1978 por el Círculo de Periodistas Deportivos como mejor golfista de ese año y uno de los fundadores del Club de Golf Santa Elvira en marzo de 1957.
Aparte de su pasión por dicho deporte, Shüler Von Delitz es reconocido como un gran aporte a la zona. Y es que vino a ejercer desde el centro de Chile su profesión de Médico Veterinario, siendo Decano fundador de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la Universidad Austral de Chile (1955-1967), la cual, gracias a aquel cimiento, se ha desarrollado en el tiempo, posicionándose hoy como la mejor Facultad de su tipo a nivel nacional.
Fue él mismo quien inculcó a su nieto, Felipe Aguilar Shüler, el amor por la disciplina, logrando con aquella semilla la cosecha de innumerables triunfos. Y es que Felipe Aguilar es reconocido como el mejor golfista nacional, con innumerables victorias en el extranjero. Entre las últimas y por segundo año consecutivo encontramos su primer lugar en el XVIII Abierto de Marbella, con 273 golpes. Lo escoltó el francés Alan Bihan con 277 impactos seguido por Nicolás Geyger con 279.
De esta forma, y como meta representante de la calidad deportiva, profesional y personal de su abuelo, Felipe Aguilar Shüler estuvo en Valdivia, la ciudad que lo vio nacer, durante los días del Abierto de Golf del Club Santa Elvira.
«Fue una gran persona el viejo…»
El joven golfista tiene claro que su «Tata» trascendió en esta sureña ciudad más allá que por los palos y pelotas.
Periodista: Tu abuelo, aparte de ser un aporte al golf, fue aporte en otras cosas importantes para Valdivia, como ser el Decano fundador de la Facultad de Ciencias Veterinarias de la UACh ¿Tienes recuerdos de su época en la universidad?
Felipe: «La verdad es que yo lo recuerdo a él ya retirado de la Universidad y dedicado totalmente al campo. Pero si me acuerdo que lo iba a ver cuando hacia sus clases magistrales a los alumnos de primer año y les contaba un poco su experiencia: que en la universidad empezó haciendo clases de medicina humana; que se fue a estudiar inseminación artificial a Alemania e Italia y después regresó y fundó el Centro de Inseminación Artificial de la UACh, por ejemplo.
«La verdad es que recuerdos del tata en la docencia tengo pocos, pero sí lo que me cuenta la gente, como sus ex alumnos, muchos de los cuales han sido Decanos en estos tiempos… todos quienes estuvieron en aula con mi tata siempre se han referido a él positivamente, como un gran profesor. La gente tiene lindos recuerdos de él, y yo también; tengo pocos recuerdos malos del tata. Me hubiese gustado quizás que hubiese echo un libro con sus historias, sus cuentos, su vida en la Universidad; no fue así, porque era de muy bajo perfil, pero sin duda que fue un gran aporte para la Facultad, y bueno, para Valdivia. Fue una gran persona el viejo…».
P: ¿Algo pendiente con él?
F: «Me hubiese encantado que me hubiese visto ganar afuera. En Chile me vio ganar mucho, viajó conmigo, pero yo siempre veía televisión con él y me hubiese gustado que me viera ganar por televisión. No pasó, o sea pasó, gané, pero fue tarde, no pudo verme, al menos no por TV (sonríe)».