La iniciativa que don Juan Ávila, guardaparques del predio San Pablo de Tregua de la Universidad Austral de Chile, tuvo hace muchos años cuando estableció árboles nativos en este sitio, es hoy una plantación de la especie raulí de 20 años de edad y de 0,1 hectáreas, la cual fue objeto de análisis en la tesis de Cristopher Fernández para optar al título profesional de Ingeniero Forestal.
Esta decisión -según don Juan Ávila – nació simplemente por el gusto de plantar una especie que para él es especial. “Este trabajo lo hice hace muchos años. Identifiqué una buena ubicación, cerca de un matorral, en San Pablo de Tregua. Vi a través de los años cómo crecían sin más manejo que limpiar el terreno de las malezas”, recordó.
“El raulí tiene una madera muy linda”, recalcó y agregó que siempre trabajó el predio como si fuera su campo. “He plantado muchos árboles, más de 2 mil, sin preocuparme de si estaba o no en horario de trabajo y sin interés de que me reconocieran esta labor”, afirmó don Juan.
Hoy, cuando ya le queda poco tiempo para retirarse definitivamente como guardaparques, agradece al Prof. Óscar Thiers, a quien le mostró esta plantación de raulí, surgiendo así la posibilidad para que Cristopher Fernández desarrollara su estudio.
Para el Ingeniero Forestal, trabajar en este sitio fue interesante. “Cuando visité la plantación, me llamó mucho la atención que no tenía relación alguna con lo que me había imaginado inicialmente, estaba establecida en una condición de bajo dosel, no presentaba la forma típica de plantación y la gran mayoría de los árboles presentaban muy buena forma, con un crecimiento que inicialmente se veía parejo y con sitio sin ninguna intervención. Esto me motivó a realizar el trabajo ahí”, expresó Cristopher, cuya tesis se denominó “Desarrollo de una plantación de Nothofagus alpina establecida bajo dosel con plantas de regeneración natural en San Pablo de Tregua, Panguipulli”.
Según el conteo de los anillos de crecimiento de los árboles, esta plantación tiene 18 años de establecida y las plantas que se utilizaron entre dos y tres años al momento del establecimiento.
Especie con potencial
El aporte del guardaparques de San Pablo de Tregua es sin duda una contribución al medioambiente y a la conservación de esta especie. Para Cristopher Fernández, el raulí “es de suma importancia ya que posee un importante potencial como plantación debido a la alta calidad de su madera. Si bien el raulí presenta una distribución natural continua por la Cordillera de Los Andes desde la Provincia de Curicó hasta el sur de la Provincia de Valdivia, no son muchas las poblaciones naturales que quedan en nuestra región debido a su explotación masiva durante los años en que funcionó el Complejo Maderero Panguipulli, y realizar este tipo de plantaciones con plantas de regeneración natural ayuda sin incurrir en grandes costos a la reforestación de esta especie”.
En cuanto a las principales conclusiones de la tesis, Cristopher explicó que esta plantación sin intervenciones silvícolas previas presentó bajos valores de volumen y área basal en comparación a otras plantaciones establecidas con similares densidades, pero con semejantes incrementos medios anuales en altura. “La utilización de plantas de regeneración natural provenientes de bosques colindantes se presenta como una opción plausible para el establecimiento de plantaciones forestales -ya sea con fines productivos madereros o de enriquecimiento de bosques degradados-, en circunstancias en las que no se cuente con cantidad de plantas para satisfacer demandas de plantación o para el aprovechamiento del material disponible, ya que presentan un desempeño inicial similar al de otras experiencias”.
Don Juan Ávila, quien recibirá una copia de la tesis, manifestó estar agradecido con el Prof. Óscar Thiers y el Ing. Forestal Cristopher Fernández por la valoración de su trabajo.